El paro en las cinco unidades de la UAM fue histórico y necesario para exigir una educación libre de violencia machista, ante un país con 11 feminicidios y 60 violaciones diarios y un sin número de casos de acoso y abuso.

Estamos confrontando a los poderes enquistados en la UAM, pero también al sistema político y social que reproduce la violencia: el capitalismo y el patriarcado.

Logramos demostrar la fuerza que tenemos cuando organizamos, siendo referente de lucha para otras escuelas. Se logró la expulsión del violador de la UAM-C, y el despido y la detención de Jaime Leopoldo, profesor de UAM-A que abusó de tres menores. Pero queda una lista enorme de agresores frente a los que no se ha tomado ninguna medida concreta.

El problema de fondo es que no hay ley, protocolo o reglamento que valga si los funcionarios de alto rango que deben hacerlos valer son ellos mismos agresores, por eso exigimos que se vayan todos y desde Libres y Combativas lanzamos la campaña #FueraMachistasYMisoginosDeLaUAM.

Así señalamos que el problema de la violencia machista está enquistada en lo más alto de las cúpulas de poder de la UAM, desde el excontralor Garcini y su equipo de trabajo más cercano, hoy fuera de la UAM gracias a la campaña, hasta el Abogado General, Rodrigo Serrano, todo con el encubrimiento del Rector.

Más de 12 compañeras fueron despedidas con el mismo modus operandi, es decir, violando el Contrato Colectivo de Trabajo, sin ningún derecho ni liquidación, jefas de familia fueron echadas a la calle sin un peso, incluso después de años de trabajo. Algunas de ellas fueron despedidas por alzar la voz por casos de acoso sexual, otras sufrieron discriminación clasista. Nuestra compañera Sam, fue acosada por el Contralor, despedida de manera ilegal, amenazada de muerte y contra su familia, y acosada en redes intentando deslegitimar la lucha.

Actualmente, seguimos con la denuncia laboral por despido injustificado y por la restitución de sus derechos y otra, judicial, por acoso, discriminación y violación de sus derechos humanos. Esta es sólo una parte del proceso, otra parte fundamental es la organización y la movilización, por ello hemos realizado mítines fuera de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, participado en apoyo a los paros de la UAM y participando en marchas y denunciando públicamente el caso.

Todo esto nos ha permitido echar a parte de los funcionarios agresores, asentando así un precedente muy importante para la lucha contra la violencia machista en la UAM. Sin embargo, el proceso sigue por la restitución de sus derechos.

Este ejemplo nos confirma que la lucha de trabajadoras, profesoras y estudiantes es la misma. La violencia machista opera a todos los niveles y nos arrincona o nos expulsa de la UAM si no alzamos la voz y nos organizamos. Es por eso que la lucha debe continuar y debemos velar por el cumplimiento de los pliegos petitorios y el seguimiento a los acuerdos.

Necesitamos una organización permanente y amplia, que permita la participación de la mayor cantidad de compañerxs posible, si limitamos la participación o carecemos de estructuras democráticas que la permitan, caeremos en el desgaste y el aislamiento, esta es una tarea que ha quedado asentada tras el paro, entre más amplia sea la participación, mayor será la lucha.

Otro elemento fundamental en la lucha es la movilización más allá de la UAM, salir a las calles, hacernos más visibles causa un gran impacto. Es muy conveniente para las autoridades que nos mantuviéramos en los márgenes de las unidades, que no hiciéramos ruido fuera y sin poner en riesgo las aspiraciones políticas del rector, el impacto del paro fue bastante potente, pero sin duda romper el aislamiento ayuda a mantener al movimiento fuerte, ejerce mayor presión y lo vincula con toda la comunidad, el pueblo y otras escuelas.

La propaganda y la información, son otro aspecto fundamental, las redes sociales pueden ser grandes herramientas, pero salir y hablar con la comunidad y otros estudiantes nos permite explicar nuestras razones para luchar y ganar un apoyo mayor. Las asambleas, volanteos y mítines informativos, nos permiten mantenernos informadxs para dar seguimiento a los acuerdos y organizadxs para responder ante la falta de cumplimiento de ellos.

¡Basta de machismo institucional dentro de las universidades!

¡Fuera el machismo de nuestras escuelas, ni una más!

¡Justicia para Sam y todas las agredidas y despedidas!

Ayúdanos a exigir Justicia para Sam, compañera despedida de la UAM por alzar la voz contra la violencia machista. Firma aquí la resolución de apoyo.