El pasado sábado 29 de septiembre, se llevaron a cabo mítines y manifestaciones pacíficas, nacionales e internacionales dentro y fuera de establecimientos, que venden productos de la empresa trasnacional DRISCOLL´S (principal distribuidora de fresas, zarzamoras y moras). La cual lucra con el sudor y trabajo de miles de jornaleros y jornaleras del campo. Estas manifestaciones fueron convocadas por el Sindicato Independiente Nacional Democrático de Jornaleros Agrícolas (SINDJA) y demás organizaciones de izquierda exigiendo: libertad sindical, contrato colectivo con SINDJA, no más acoso a las compañeras Jornaleras y un salario justo. Además de la exigencia y cumplimento de los acuerdos firmados el 4 de junio del 2015 entre el gobierno y los Jornaleros en lucha.
Han pasado más de 3 años (17 de marzo del 2015) donde más de 50,000 mil jornaleros y jornaleras perdieron el miedo a los explotadores donde se organizaron e impulsaron una huelga laboral que duró más de 3 meses, bloquearon puntos de acceso al municipio, marcharon en las calles y establecieron campamentos para manifestarse en contra de los bajos salarios percibidos, las jornadas laborales extensas, la explotación infantil y el abuso de las compañeras jornaleras.
Uno de los grandes logros de esta lucha fue el surgimiento del SINDJA, sindicato que actualmente cuenta con más de 80 mil trabajadores jornaleros afiliados en diferentes partes de la república y que desde entonces continúa con la lucha por la mejora de condiciones de vida del pueblo trabajador y jornalero.
Uno de los propósitos del boicot es evidenciar la situación precaria a la que son sometidos los jornaleros y desenmascarar las grandes ganancias de esta empresa, ya que pagan en algunos casos $140 la jornada laboral que puede durar hasta 14 horas, o por destajo donde pagan entre $12.00 y $18.00 pesos la caja recolectada y que la venden en el mercado entre $400 y $500, obteniendo un índice de ganancia bastante amplio que contrasta con el sueldo de quien surca el campo. Los compañeros jornaleros en lucha de San Quintín sólo exigen lo que les pertenece. Actualmente, una estrategia de estas empresas es la imposición de la CROM un sindicato charro a su servicio, para impedir que los trabajadores puedan organizarse libremente.
Continuemos con la difusión de lucha de los y las compañeras jornaleras de San Quintín llamando a la no compra de estos productos Driscoll´s. El SINDJA tendrá que extender la lucha a fábricas y calles, haciendo un llamado a marchar, a cerrar casetas, a vincular la lucha con otros jornaleros, como lo ha venido haciendo, a tomar las tierras y ponerlas bajo el control democrático de los jornaleros.
¡Por salarios dignos y un contrato colectivo con el SINDJA!
¡No más acoso a las jornaleras!
