Todo el centro histórico se vistió nuevamente de amarillo y sabor a triunfo por el gran atractivo que representaba portar el gafete que acreditaba como delegados y vislumbraba la oportunidad de decidir cual seria el futuro de nuestro país ante un nuevo contexto de fraude electoral como suele ocurrir cada sexenio, con la novedad de que ahora si existe alguien dispuesto a luchar en contra de la imposición y llevar a cabo una transformación nacional, esta era la perspectiva de todos los asistentes. Desafortunadamente, al estar en la Convención se vio claramente que lo único para lo que se estaba ahí era para votar una serie de resolutivos discutidos y difundidos previamente, sin la oportunidad de hacer nuevas propuestas, ni espacios para el debate como se había prometido, además de la falta de escrutinio y ganas de escuchar la opinión de los convencionistas. Todo esto sin duda, le restaba democracia a la convención, sin embargo la gente seguía entusiasmada y con ganas de salir de ahí dotados de un programa de lucha en contra de los graves problemas nacionales propuestos como temas centrales de la CND: contra la pobreza y desigualdad, por la defensa de la soberanía nacional, por la democratización de los medios de comunicación, contra la corrupción e impunidad y sobre todo, saber si AMLO se convertiría a patir de ese día, en coordinador de la lucha nacional o seria el próximo presidente de México.
Por consenso unánime, AMLO fue nombrado presidente legitimo por la CND, para instalar un gobierno con sede al el Distrito Federal y subsidiado con recursos propios, tomando posesión el 20 de noviembre. Se dio a conocer además, un plan de resistencia civil pacifica en tres etapas: la primera, el 27 de septiembre con la jornada nacional contra la usurpación y la privatización de los energéticos; la segunda, del 2 al 12 de octubre con la jornada contra la usurpación, en defensa de la educación publica y laica, por las libertades democráticas y la no discriminación; y la tercera, el 1 de diciembre para impedir la toma de protesta de Felipe Calderón. Para la coordinación de la CND se crearon 3 comisiones: la organizadora, para la resistencia civil y para la organización del plebiscito y la constituyente, algunos personajes conocidos que las integran son: Luis Mandoki, Jesúsa Rodríguez, Ortiz Pinchetti y Carlos Imaz, este ultimo fue rotundamente rechazado por los convencionistas por sus conocidos involucramientos en los video escándalos, lo cual fue olímpicamente ignorado y finalmente todas las comisiones quedaron como estaban propuestas. Algunas otras propuestas son: seguir portando el moño tricolor, dejar de consumir productos que apoyaron a Fecal en su campaña electoral, dejar de ver los medios vendidos, generar nuevas formas de información y una gira nacional para recabar las demandas locales, así como volver a sesionar la CND el 21 de marzo de 2007.
A pesar de los limites de la CND, esta fue bien recibida por los asistentes y representa sin duda, un paso adelante en cuanto a las ganas de organizarse y luchar de las masas en nuestro país por una autentica transformación social. Desde la campaña electoral, AMLO se ha convertido en el portador de las demandas mas sentidas del movimiento nacional, su actitud firme ante todas las adversidades de sus contrincantes ha generado confianza de las masas hacia el, por lo cual todas y cada una de sus propuestas han sido llevadas a la practica por todo el movimiento, aunque algunas de estas reflejan claramente su ineficacia para echar atrás las dediciones de la burguesía y sus instituciones.
Por el carácter Revolucionario de la CND
Llevamos varios meses en constantes movilizaciones y aunque cada una de estas ha sido un paso adelante en la conciencia de las masas y su disposición a la lucha, es claramente urgente la necesidad de generar acciones más contundentes. Estamos ante un proceso abiertamente revolucionario y si no queremos que la CND se convierta en gobierno fantasma es necesario que el poder pase a las manos de los trabajadores del país, por medio de la expropiación de la burguesía nacional e internacional. Todo el poder debe pasar al pueblo de México por medio de asambleas democráticas y auténticamente representativas con delegados electos en cada pueblo, colonia, centro de trabajo, escuela, etc. Para una coordinación central por municipios, estados, sectores y a nivel nacional en donde se conjunte el plan de resistencia civil contra la usurpación y las demandas locales. La tarea fundamental es crear un Frente Único de todos las asambleas para juntas convocar a una Huelga General el 1 de Diciembre para impedir la toma de posesión, del usurpador Fecal. Para evitar la represión del estado hacia el pueblo organizado se deben crear los comités de autodefensa y sobre todo, hacer un energético llamado a las bases del ejercito, que forma parte del pueblo y ante la perspectiva del triunfo del movimiento no dudarían en desobedecer a sus altos mandos que protegen a la burguesía y sus intereses para pasarse de nuestro lado. Es por todo esto fundamental una actitud firme y organizada para la nueva etapa de lucha que va a iniciar en nuestro país.
Debemos además, dotarnos de un programa de transformación nacional de carácter socialista que reivindique todas las demandas del pueblo defraudado y explotado por los gobiernos PRIistas y PANistas. El cual debe ser defendido energéticamente por todo el movimiento y la lucha debe ser por su instalación integra sin concesiones. Luchar por el Socialismo, es luchar por combatir la pobreza y la desigualdad dando empleos a todos los que están en condiciones de trabajar y con salarios dignos para cubrir todas las necesidades básicas. Luchar por la defensa de la soberanía nacional defendiendo los energéticos, la educación, el derecho a la salud y todo el patrimonio nacional para los trabajadores y no en beneficio de una minoría privilegiada. Luchar por el derecho a la libre expresión y la defensa de todas las ideas, para crear nuevas formas de percibir las luchas y participar en ellas. Luchar en contra de los que nos roban y nos explotan para que no sigan siendo protegidos por el estado. Luchar por la transformación de las instituciones que sirven a la burguesía y el gobierno para conservar sus privilegios, con una transformación de toda la sociedad por una realmente comprometida con la satisfacción de las necesidades de todo el pueblo de México.
Para que AMLO pueda ser el "presidente legitimo" en un escenario tan polarizado como el que tenemos actualmente, se debe arropar con todo el movimiento y un programa socialista, delegarle a la clase trabajadora por medio de asambleas auténticamente democráticas. No queremos una CND como la del 16 de septiembre en donde solo vayamos a votar, queremos ser parte de la construcción de una nueva forma de poder, el poder de la clase trabajadora.
Contra la Imposición:
¡Una CND auténticamente revolucionaria!
¡Todo el poder a la clase trabajadora!
¡Por una Huelga General el 1 de diciembre!