L@s hij@s de l@s trabajador@s, campesin@s e indígenas a la universidad
Por una educación gratuita, científica, democrática y popular
La educación es uno de los derechos fundamentales de los pueblos. Para la mayoría de las familias trabajadoras la reivindicación de una escuela pública digna es una necesidad concreta y puntual, acceder al conocimiento nos ayuda a exigir una vida mejor, y también nos da una herramienta contra nuestra opresión. Aunque el artículo 3° de la Constitución obliga al Estado a garantizar la educación para todos, la realidad es que millones de niños y jóvenes aún no cuentan con este derecho y nuestro sistema educativo arrastra problemas que se vienen agudizando desde hace años.
¡Exigimos que se destine el 10% del PIB para la educación pública!
En nuestro país se destina el 5% del PIB a la educación, presupuesto que no es suficiente para garantizar una educación digna para todos. La sobrepoblación en las aulas, que de acuerdo con los pedagogos dificulta el proceso de aprendizaje; la precarización laboral de los docentes; la falta de centros de estudio en cada rincón del país; el mejoramiento de nuestros laboratorios, salas, aulas, auditorios y áreas de cultura y arte; las inexistentes casas de estudiantes y comedores escolares; etcétera son obstáculos para miles de jóvenes. Las condiciones actuales tampoco abarcan la demanda de todos los aspirantes a una educación media superior y superior, siendo la falta de recursos económicos y los exámenes de selección los principales obstáculos para los jóvenes hijos de familias humildes que quieren acceder a los estudios superiores.
En el actual gobierno se habla de un presupuesto educativo para el 2020 de 807 mil 305 millones de pesos, un 0.5% más que en 2019 que representa sólo el crecimiento de la inflación, además de que el 90% de este incremento corresponde al pago de salarios de los altos funcionarios y una burocracia absurda que no tiene nada que ver con nuestra formación. Desde nuestro punto de vista es un grave error no aumentar los recursos en esta área fundamental para combatir la desigualdad, pobreza, rezago y violencia.
Si se quiere hacer realidad de verdad las consignas: ni un joven más rechazado, “becarios, no sicarios” y empleos dignos al finalizar nuestros estudios, se debe de otorgar más recursos y democratizarlos, de lo contrario, los discursos se quedan en meras buenas intenciones y en ese lapso los muertos los sigue pagando el pueblo con hijos sin escuela.
¡Por la democratización de nuestras escuelas y sus recursos!
Otro de los grandes problemas de la educación en México es la falta de democracia en todo el sistema educativo, poco sirve aumentar el presupuesto a la educación si se le sigue dando mal uso por parte de las autoridades. La participación de los estudiantes, trabajadores y profesores en la toma de decisiones es poca o nula, es el caso del IPN y la UNAM donde la comunidad universitaria no es parte de la elección del Director General y Rector. Para otras instituciones la situación no es muy diferente, pues se carece de representes que consulten a los estudiantes, por ejemplo, cuando se modifican los planes de estudio, la distribución del presupuesto, la creación de nuevas áreas de conocimiento o investigación, etcétera.
A consecuencia de la falta de democracia en la educación hay mal manejo de los recursos económicos, enriquecimiento ilícito, malversación y concentración de poder en unos cuantos. Es por eso que pugnamos por la participación del conjunto de la comunidad estudiantil, académica y trabajadora en la toma de decisiones trascendentales que nos afectan a todos, a través de asambleas, comités de representes, votaciones y elecciones abiertas, amplias y democráticas.
¡No más criminalización y violencia contra la juventud!
A la lista de problemáticas se suma la constante violencia hacia la juventud y particularmente a los estudiantes organizados. La estigmatización de los estudiantes en lucha por parte de los medios de comunicación, la constante infiltración de agentes provocadores para dividir los movimientos estudiantiles, la operación de grupos porriles al interior de escuelas con el objetivo de violentar y amedrentar a las comunidades educativas, las campañas de desprestigio hacia los estudiantes organizados, la violación sistemática de los derechos de los estudiantes, la violencia machista hacia nuestras compañeras dentro y fuera de los planteles educativos así como la violencia generalizada hacia la juventud que muchas veces se cobra la vida de compañeras y compañeros en asaltos o fuego cruzado, es una cotidianidad en nuestras vidas.
Denunciamos y repudiamos especialmente la represión que en los últimos meses en Chiapas se está viviendo contra estudiantes de la Normal de Mactumactzá y Jacinto Canek, demostrando que dentro de MORENA aún hay muchos que siguen con las viejas costumbres de los partidos de derecha mientras su dirigencia y AMLO guardan silencio. Exigimos el cese de estos ataques, indemnización de los heridos, así como la renuncia del Gobernador de Chiapas. Y reclamamos la atención inmediata de las demandas de nuestros compañeros normalistas.
La solución a la situación de violencia que vivimos dentro y fuera de nuestros planteles está muy lejos de la implementación de cámaras de vigilancia, torniquetes y credencialización en los planteles o solicitar la intervención policial, ya que todas estas medidas han significado mayor control y represión hacia el estudiantado que se organiza y lucha contra las problemáticas escolares y no atienden el problema de raíz.
Para solucionar el estado de degradación social que este sistema causa necesitamos luchar por un empleo digno para todos al finalizar nuestros estudios, equipamientos de todas nuestras colonias de escuelas públicas, hospitales, casas de cultura, centros deportivos, bibliotecas, y mediante la organización y autodefensa de las comunidades expulsar el narcotráfico de nuestras escuelas y colonias.
¡Fuera el machismo de nuestras aulas!
Uno de los rostros más abominables de la violencia que estamos padeciendo es la perpetuada hacia nuestras compañeras, que cada día se cobra la vida de diez. Ésta ya ha llegado a los espacios que considerábamos seguros, como son nuestras escuelas, en los últimos dos años, el número de quejas presentadas por violencia de género en la UNAM aumentaron once veces (1157%), en comparación con la cantidad registrada durante los 13 años anteriores.
Esta violencia se agrava por la impunidad de los agresores y la protección y connivencia de las autoridades. Nuestra batalla día a día no sólo es contra nuestros agresores sino también contra la violencia institucional que se ejerce sobre las victimas que valientemente hacen la denuncia, los funcionarios de las universidades, una vez más, demuestran estar del lado de los que se sirven de nuestro miedo, explotación y opresión, son incapaces no solamente de sentir empatía, sino que no saben cómo proceder, los minimizan, nos atacan, culpan y dan carpetazo, dejándonos a expensas de nuestros agresores y con la vida destrozada, quedando la solución en manos de los propios estudiantes, las víctimas y sus familiares.
Por eso, miles de mujeres hemos salido a las calles las veces que han sido necesarias para exigir justicia, mostrar nuestra indignación y hartazgo a esta situación. Exigimos que se investigue a fondo todo acto de violencia hacia nosotrxs y no simulación, en particular, cada caso de violencia machista dentro de nuestras escuelas y que se pongan las sanciones correspondientes. También desde este espacio nos sumamos y hacemos el llamado a nutrir y hacer masiva la jornada de lucha del próximo 25 de noviembre en el marco del día internacional contra la violencia hacia las mujeres.
Por un gobierno realmente de los trabajadores y la juventud
A casi un año de gobierno de la llamada 4ª Transformación no vemos verdaderos cambios en el país, pues en realidad no se está rompiendo con el modelo económico prevaleciente y con la lógica capitalista. Creemos que sólo a través de la organización estudiantil y la movilización en las calles podremos conseguir una educación digna para todas y todos. A los hijos de los trabajadores, campesinos e indígenas nunca nadie nos ha regalado nada y gobierne quien gobierne los derechos se ganan y se defienden con la organización y la lucha.
Llamamos a todxs lxs estudiantes, colectivos y organizaciones estudiantiles a sumarse las siguientes actividades:
- Mitin por el 10% del PIB a la educación pública: Palacio Nacional, 14 de noviembre, 16:00 horas. Hacemos el llamado a replicar actividades en el resto del país el mismo día y a la misma hora.
- Sumarnos a la movilización del 25 de noviembre
- Reunión para la articulación de las luchas estudiantiles y la unidad estudiantil. Lugar: C.U. UNAM; día: 28 de noviembre; hora: 4pm.