Hoy por la mañana, 28 de febrero, fue asesinado el profesor Francisco Javier Uribe Patiño, de la cátedra Democracia y violencia de la Universidad Autónoma Metropolitana Iztapalapa (UAM-I). Los hechos ocurrieron en la puerta principal del campus cuando, al transitar en su automóvil el catedrático fue interceptado por un individuo, mismo que descargo un arma de fuego a este arrebatándole la vida. Por el momento la versión oficial señala que el incidente se produjo cuando el profesor Uribe Patiño intentó evitar ser presa de un asalto.
El asesinato del profesor Uribe Patiño no es un hecho aislado más y por el contrario representa un nuevo episodio de la larga cadena de crímenes sangrientos padecidos por la comunidad de la UAM. Por señalar algunos casos entre los más recientes, podemos mencionar los siguientes:
Enero de 2009: tras 42 días de intensa búsqueda por parte de su familia, es localizado el cuerpo sin vida de Luis Eduardo Cisneros, estudiante de la maestría en investigación educativa de la UAM-X. El hallazgo fue hecho en el SEMEFO del Municipio de Valle de Chalco, Edomex, y la causa oficial de la muerte fue atropellamiento. Esta última versión es rechaza por la familia de Luis Eduardo la cual informó que el 27 de noviembre del 2008 el estudiante de la UAM-X fue presa de un asalto a cargo de un grupo de policías del Municipio de Chalco, mismos que le robaron su computadora portátil, su teléfono celular y 50 pesos. Luis Eduardo denunció legalmente el robo y para localizar a los culpables, fue obligado a identificarlos personalmente de entre 600 elementos de la policía de Chalco. Nos obste el temor a las represalias motivó a Luis Eduardo a retirar la demanda. Cuando su cuerpo fue localizado los reportes del SEMEFO indicaron que se encontró a su lado su billetera con su dinero intacto, pero sin ninguna de sus identificaciones la cuales desaparecieron. Todo esto hace suponer a la familia de Luis Eduardo que su hijo fue presa de una venganza por haber demandado a los policías que lo asaltaron. Al día de hoy este crimen continúa impune.
Enero de 2010: es asesinado en su domicilio el profesor Carlos Fortino Baez García, académico en la UAM-A. De acuerdo a las indagaciones oficiales el catedrático fue asesinado por encargo de su excónyuge, misma que fue detenida 10 meses después del asesinato tras ser capturados los asesinos materiales.
Noviembre de 2011: es asesinado de cuatro puñaladas el joven de 22 años de edad Eduardo Sánchez Maya, estudiante de la UAM. Los hechos ocurrieron en la colonia San Rafael, en Azcapotzalco, cuando el estudiante, de acuerdo al informe oficial, trató de evitar el ser asaltado por un individuo armado con un cuchillo, mismo que huyó y del cual no se sabe nada. También este hecho sangriento continúa impune.
Noviembre de 2011: es localizado en un paraje cercano al volcán Popocatepetl el cuerpo sin vida de Jessica García Sánchez, estudiante de la UAM-I. Oficialmente se desconoce el móvil del crimen sin embargo el cuerpo de Jessica, quien ya tenía para entonces varios días desde que había desaparecido, poseía visibles muestras y marcas que indican que fue presa de tortura. También este caso continúa impune.
Toda esa realidad brevemente relatada habla ya por sí misma de una amarga tragedia que abate a la comunidad de la UAM que no puede ser frivolizada calificando todos esos crímenes como simples actos delictivos. La delincuencia está ahí, asechando todos los días la vida de los trabajadores y de sus hijos, sin embargo hay que señalar que los criminales no brotan de la nada sino que son obra de la descomposición capitalista; que la marginación, la miseria masiva, arrojan como saldo una descomposición social de la que brota toda clase de aberraciones tales como la delincuencia y la criminalidad. Hoy en día la norma en México es la expulsión diariamente a las filas del desempleo y de la pobreza a miles de seres humanos, es por ello que el responsable de fondo de la violencia y criminalidad extremas que padece México es este sistema que condena a la desesperanza a millones de desheredados, es decir el sistema capitalista.
Pero un cómplice más en la barbarie que afecta directamente a la clase trabajadora es el Estado burgués en este momento dirigido por Calderón. El Estado se ha encargado de fomentar el ambiente que estimula a la criminalidad desmantelando toda clase de conquistas sociales, entre ellas la educación pública misma que, dada las políticas del régimen, en los hechos le ha cerrado las puertas a millones de niños y jóvenes. Muchos de estos últimos ante el infierno de la falta de oportunidades, son condenados a la lumpenización y a la criminalidad como única alternativa.
Es por todo ello que los asesinatos de los profesores Francisco Javier Uribe y Carlos Fortino, así como de los estudiantes Luis Eduardo, Eduardo Sánchez y Jessica García, todos ellos integrantes de la comunidad de la UAM, deben ser considerados como crímenes del capitalismo y crímenes de Estado. Debemos organizarnos y luchar para que todos esos asesinatos no queden en la impunidad, sin embargo para frenar esta oleada de crímenes sangrientos contra la comunidad de la UAM es necesario ir al fondo de las cosas. Por ello al mismo tiempo es necesario marchar al lado del movimiento obrero para luchar contra la barbarie capitalista y el Estado burgués.
Únete al CEDEP y lucha por una alternativa socialista para el movimiento estudiantil y obrero.