A finales de abril del año en curso nuestra organización fue objeto de un intento por tratar de silenciar nuestras ideas: nuestra compañera consejera académica de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa, era cesada de dicha instancia. Los argumentos jurídicos, amañados como acostumbran las autoridades, se derrumban ante la evidencia de un proceso turbio y poco claro donde el principio del debido proceso fue sencillamente violado. La razón de fondo era la intentona de las autoridades por frenar las denuncias y la organización que hemos comenzado a desarrollar. Desde la campaña para su elección fuimos claros al denunciar las irregularidades y los gastos onerosos realizados por las autoridades, actitud que nuestra consejera mantuvo a lo interno de esa instancia y por lo cual se había convertido no solo en una molestia para las autoridades, sino especialmente en un referente de lucha para los estudiantes y trabajadores de la UAM-I.
El 12 de Junio del presente año realizamos nuestro mitin a pesar del intento de las autoridades de frenarlo, al negarnos el uso del espacio y de audio que solidariamente había solicitado el SITUAM para poder realizar nuestro acto, pero con megáfono en mano y los argumentos claros comenzamos a exponer la situación. Contamos con la participación de compañeros del CEDEP de otras universidades, pues sabemos las problemáticas exclusivas de aquí, como es el caso de la Facultad de Química de la UNAM, en la cual se pretende cobrar el uso de laboratorios o el caso de la FES Aragón donde se cobra 14 pesos por el uso de los laboratorios de computación donde se toman algunas clases, que significa por la vía de los hechos el cobro por la clase, por mencionar las cuestiones más superficiales. El mal manejo de los recursos económicos que sufren nuestros centros de estudio termina afectando nuestra formación profesional, al no tener las condiciones para realizar prácticas de campo o el material bibliográfico suficiente.
Denunciamos las pésimas condiciones de nuestras universidades así como la intención del Estado por profundizar esta situación, ante el agravamiento de la crisis económica. Desde la imposición de Felipe Calderón y la indecisión de los dirigentes de izquierda por llevar la lucha más allá de la arena jurídica y electoral, los jóvenes y trabajadores hemos sido testigos de cómo de a poco, están siendo recortados nuestros derechos con la expectativa de la mayoría de nuestras organizaciones, que también son objeto de los ataques. Especialmente la imposición de Peña Nieto, no sin una tenaz lucha de los jóvenes y trabajadores que nos movilizamos en el verano del 2012, ha significado una nueva avanzada de la burguesía y la derecha que se prepara conscientemente para las próximas batallas de la lucha de clases. Un ejemplo claro de ello ha sido la campaña desatada en el Distrito Federal, el bastión más importante de la lucha de las masas de nuestro país que había sido coronada por un par de gobiernos de izquierda, contra la juventud. Provocaciones montadas y una campaña de desprestigio de la juventud que no está dispuesta a acatar con los brazos cruzados los ataques, han sido desde hace meses la estrategia del gobierno de la ciudad para avanzar contra los derechos democráticos conquistados en la ciudad, y que han sido un legado heroico de las generaciones pasadas de nuestra clase.
Desde el comienzo asumimos este ataque a nuestra compañera, no solo como un ataque individual o particular a nuestra organización sino como uno más de los ataques de la burguesía contra la juventud trabajadora. Por ello enarbolamos la defensa de la consejería no solo como la defensa de un espacio democrático que hemos ganado, no como un ataque particular, sino como un ataque más a los derechos democráticos de la juventud para la defensa de sus intereses de clase. El derecho a manifestarnos dentro y fuera de nuestras escuelas no ha sido un regalo de nadie, sino fruto de la lucha de nuestra clase y no permitiremos que estos nos sean arrebatados sin antes dar una batalla para defenderlos. Esa explicación política, la ampliación de un aparente ataque particular a la situación general, ha sido parte de los magníficos resultados obtenidos. El apoyo de decenas de profesores, trabajadores y de jóvenes que por primera vez nos escuchaban hablar no es sino producto de una explicación coherente y clara sobre los problemas a los que nos enfrentamos cotidianamente.
Estos resultados han sido producto del esfuerzo y también gracias al apoyo militante de los jóvenes y trabajadores que cotidianamente nos apoyan para realizar nuestro trabajo, a quienes apoyan en el boteo y especialmente a nuestros simpatizantes. El apoyo del SITUAM y del STUNAM ha sido vital para esta campaña. Desde el Comité Estudiantil en Defensa de la Educación Pública queremos agradecer a todos ellos, que nos han apoyado y apoyan en la construcción de una organización combativa para defender los derechos de los estudiantes y la juventud trabajadora. Y así mismo seguimos haciendo el llamado a la organización en nuestras filas, pues solo a partir de ello podremos no solo defender nuestros derechos que ahora más que nunca son amenazados por la voracidad del capitalismo que pretende lanzarnos sin más a la miseria y el hambre. Con el vigor de la juventud, la experiencia de nuestra clase y las ideas del marxismo arrancaremos lo que por derecho nos pertenece: el presente y el futuro.
¡Gracias a su apoyo seguimos construyendo nuestra organización, combativa y democrática!
¡Unidos y organizados venceremos!