Desde el CEDEP mandamos toda nuestra solidaridad para con las familias de nuestros compañeros Carlos Alberto y Jorge Iván, al mismo tiempo que les aseguramos que en memoria de nuestros camaradas seguiremos luchando por transformar esta barbarie ¡ni un minuto de silencio, sino toda una vida de lucha!
No es un caso aislado
Narcomenudeo, riñas callejeras, acoso y asaltos frecuentes son el pan de todos los días para los estudiantes que acudimos a la FES Aragón. La zona de bares que rodea la facultad se ha vuelto un foco rojo que la delincuencia ha aprovechado para atacar frecuentemente a la comunidad estudiantil que tiene que atravesar esta área para llegar a las estaciones de metro cercanas.
A pesar de este problema que cada año se vuelve más evidente, las autoridades de la FES se han hecho de la vista gorda y no han tomado medidas para frenar esta situación. Pese a que se mantiene un contacto permanente con las autoridades municipales y que cuentan con todo el prestigio de la UNAM para lanzar una denuncia pública los directivos de la FES han guardado silencio frente al deceso de nuestros compañeros y de esta terrible situación.
Pero este fenómeno no es exclusivo de nuestra Facultad, recientemente hemos visto los evidentes lazos de impunidad con los que operan narcomenudistas en escuelas como la FCPyS o las exigencias por mayor seguridad en otros planteles de la UNAM como la FES Cuautitlán y la FES Zaragoza.
Por el PUMABUS y mayor seguridad, ni un paso atrás
Aunque los sucesos no ocurrieron en la Facultad, estas tragedias nos recuerdan la vulnerabilidad en las que nos encontramos (En 2013 un compañero de Ingeniería perdió la vida rumbo al metro Nezahualcóyotl) y que seguirá empeorando si no tomamos cartas en el asunto.
Los estudiantes que participamos en el homenaje luctuoso el pasado 26 de noviembre, así como los padres de nuestros compañeros somos conscientes de que para evitar que estos sucesos se repitan es necesario organizarnos para exigir solución a la problemática de inseguridad.
El CEDEP ha lanzado campañas de firmas y manifestaciones para exigir un PUMABÚS y una auténtica estrategia de seguridad para los alrededores de la FES, aunque las autoridades se han visto obligadas a ceder parcialmente (habilitando el servicio “sendero seguro”), es necesario que sigamos adelante en la lucha hasta que nuestras demandas sean cumplidas.
Llamamos a los estudiantes, maestros y trabajadores de la FES Aragón y de todas las escuelas a organizarnos para exigir nuestro derecho a la seguridad en la escuela y sus alrededores.
¡Transporte seguro y gratuito ya!
¡Ni un estudiante asesinado más!
¡Organízate y lucha!