Avancemos hacia la unidad de los trabajadores y el paso a la lucha política

La CTA resolvió convocar a un Paro Nacional para el próximo 27 de mayo, con movilizaciones en todas las provincias. Al mismo se llega luego de que los reclamos urgentes formulados en el Congreso de la Central, a fines de marzo, fueran desoídos por el gobierno, pese a la Jornada del 22 de abril y las numerosas luchas sectoriales de estas últimas semanas.

Bajo la consigna de ¨distribuir la riqueza para terminar con la desigualdad¨, se solicita al gobierno que: -Prohíba los despidos por 180 días; -Convoque de urgencia al Consejo del salario para elevar el salario mínimo; -Otorgue una asignación familiar universal y el 82% móvil para los jubilados; -Apertura de paritarias libres; -Incremento del subsidio por desempleo para todos los desocupados y –Reconozca la personería gremial a la CTA.

El gobierno, frente a la crisis capitalista, ha tratado de salvaguardar las ganancias empresariales mediante subsidios, créditos, perdón de deudas impositivas, utilizando nuestros fondos jubilatorios, y con una devaluación del peso de 25% y tarifazos varios en transporte, gas y otros servicios públicos. Ante los despidos y suspensiones trató de apagar incendios haciendo cargo al estado del pago parcial o total de salarios, y mediando para negociar los achiques de planta. Y en las últimas semanas los esfuerzos del gobierno han estado puestos en el adelanto de las elecciones. Todas estas maniobras las ha realizado con la colaboración de la dirigencia sindical cegetista.

Desde la Corriente Socialista El Militante apoyamos este llamamiento a Paro Nacional de la CTA y las demandas bajo las que se convoca, así como las acciones que se realizan en defensa de la salud y educación públicas. A todo lo cual queremos agregar la exigencia de -Que el estado deje de subsidiar a los empresarios y -Nacionalización, bajo control obrero, de las fábricas que cierren o que despidan personal.

Además consideramos necesario que la CTA emplace públicamente a la CGT a que se sume al Paro para, de esta manera, llegar al conjunto de la clase obrera. Para que la CTA se convierta en la ¨articuladora de la unidad de los reclamos de la clase trabajadora¨ como afirma la convocatoria debe dirigirse también a los trabajadores de base de la CGT.

Si bien la CTA agrupa a numerosos sindicatos de estatales, docentes, judiciales, salud y algunos de trabajadores privados como neumático, energía, transporte, visitadores, etc. la mayoría de los trabajadores del sector privado aún permanece organizado bajo la CGT.

Si el llamamiento obtiene eco en algunas seccionales, comisiones internas o cuerpos de delegados sería un importantísimo paso hacia la unidad de la clase. Y si se recibiera un rechazo de la dirigencia cegetista, quedarían al desnudo como los que se niegan a luchar en defensa de los intereses de sus representados. En todo caso saldría fortalecida la CTA por su iniciativa y podría ayudar a los militantes honestos que sufren el contrapeso de la burocracia cegetista en su accionar sindical.

En ese camino de unidad de la clase es como se puede encontrar la forma de ¨que la crisis no la paguemos los trabajadores¨.

Por otro lado la actitud del gobierno y la necesidad de planteos no sólo reivindicativos sino también políticos (como las mencionadas nacionalizaciones de empresas y la recuperación de recursos naturales y palancas fundamentales de la economía para evitar la continuidad del saqueo), empalman con la necesidad, planteada en las asambleas de la Constituyente Social desde el año pasado, de dar el paso hacia una construcción de una herramienta política con eje en los trabajadores.

Los planteos de conformar un Movimiento Político, Social y Cultural son acertados y creemos debería adoptar la forma de un Partido de Trabajadores que incorpore a los demás sectores populares.