La marcha convocada para el 3 de junio por la UNT y la Alianza clasista ha sido una muestra de la fuerza de la clase trabajadora. Ahora es necesario implementar nuestros métodos tradicionales de lucha: la huelga general.

La crisis del sistema capitalista esta golpeado seriamente los bolsillos de la clase trabajadora, situación que se ve agudizada por la política económica que esta llevando acabo el gobierno ilegitimo de Felipe Calderón. En este contexto la marcha convocada para el día 3 de junio ha sido una muestra mas de la disposición de los trabajadores para defender los derechos laborales que se han ganado a lo largo de varias décadas a costa de sudor y sangre.

La situación bajo el régimen actual es incapaz de cambiar, mientras ilusoriamente Calderón creía que podía hacer crecer la economía a un ritmo del 3%, solo en el primer trimestre de este año el PIB cayo en alrededor del 5%. La bancarrota del sistema capitalista como un sistema capaz de ofrecernos algo a los trabajadores y a sus hijos es una evidencia. En este sentido los trabajadores debemos pugnar por la unificación de todas las luchas de forma tal que podamos dar un golpe certero contra el gobierno de Calderón, que es ni más ni menos que el gobierno de la burguesía y los banqueros.

Todas las organizaciones sociales, sindicatos, la CND y el PRD, debemos unificar nuestras luchas creando un frente único capaz de derribar a Calderón. Ahora mas que nunca la crisis del capitalismo esta golpeando nuestro bolsillos mientras el gobierno federal invierte más en el ejercito reduciendo el gasto social necesario para que no seamos los trabajadores quienes paguemos la crisis.

Los trabajadores debemos utilizar nuestras organizaciones tradicionales de lucha como el SME, el STUNAM, el STRM o al PRD como una herramienta de lucha contra las políticas de Calderón. Debemos exigir a la dirección de nuestras organizaciones una política clara por la defensa de las conquistas que hasta ahora hemos logrado gracias a la batalla de generaciones anteriores. Así mismo debemos exigir a nuestros sindicatos y organizaciones el llamado a la conformación de un frente único, por medio del cual aglutinar todas nuestras fuerzas bajo una sola bandera, pues por años la táctica del gobierno federal a sido la división de la lucha en luchas locales lo cual le ha permitido desarticular de forma relativamente sencilla a los diversos movimientos que han surgido en contra de las medidas reaccionarias de este. Somos una sola clase, y como tal debemos actuar. Por ello es indispensable que se pase a acciones mas decididas. Basta de los llamados al aire de una huelga general, es momento de ponerle fecha y hora para de una vez por todas demostrar que somos los trabajadores quienes hacemos que este sistema funcione, que sin nuestro permiso no se prende ni un foco ni gira una rueda.

Una verdadera política de defensa de nuestros derechos laborales es la constitución programa de clase en nuestras organizaciones, es decir un programa socialista que eche de una vez por todas al capitalismo al basurero de la historia, pues solo de esta forma lograremos realmente la defensa de nuestras conquistas laborales.

¡En defensa del empleo y el salario, huelga general!