A cada momento es más difícil contener a las masas de trabajadores que deciden lanzarse a la lucha para defender sus derechos más fundamentales ante la severa crisis que enfrenta el país, ya a lo largo del año hemos visto como diferentes sectores de la clase trabajadora han decidido iniciar huelgas para detener los ataques de la burguesía a través su más servil secuaz: el gobierno de Calderón.
Desde enero surgieron luchas como la de los pescadores, la de los transportistas, los 200 trabajadores de Homex, las de los trabajadores de Olympia, la de los mineros, los maestros contra la Alianza por la Calidad Educativa, la de Volkswagen, la de la Siderúrgica Arcelor Mittal y hasta los sectores que se pensaban privilegiados como los de la industria aérea, particularmente los de Aviacsa y Aeroméxico. Esto demuestra que los trabajadores están dispuestos a defender sus derechos y sobre todo que están decididos a salir victoriosos.
Triunfa otra huelga: Ahora en Acapulco
La crisis que vive el capitalismo se ve reflejada en cada aspecto laboral del país, y como era de esperarse el sector turístico no fue la excepción, pues el pasado 21 de agosto a las 15:00 horas, los 50 trabajadores de planta y eventuales del Hotel Maralisa ubicado en la calle Paseo Alemania y Costera Miguel Alemán, en el puerto de Acapulco, colocaron las banderas rojinegras por el adeudo aproximado de 2.5 millones de pesos en prestaciones, que incluyen el pago de adeudos al IMSS, Infonavit y al Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR). (Cuyos propietarios, Hoteles Poseidón, administran también los hoteles Panoramic, Caleta y Los Pericos)
Los trabajadores al instalar las guardias con las banderas rojinegras a la entrada del hotel, tuvieron que enviar a otros hoteles a las familias que se alojaban en 35 habitaciones, bajo previó aviso, informó el secretario general de la Sección 112 de la CTM, Rodrigo Ramírez Justo, y además dijo: “Estamos siendo respetuosos con el turista, yo creo en que se les deben brindar todas las atenciones, pero tampoco vamos permitir que se pisoteen los derechos de los trabajadores".
Por otra parte informó que el 90% de los hoteles de Acapulco adeuda al Infonavit, es decir entre 40 y 50 de los llamados grandes que operan en Acapulco, tienen adeudos con el Infonavit y el IMSS, situación que afecta a entre 8 mil y 9 mil trabajadores. También menciono que “Hay que ponernos la pilas para defender a los compañeros trabajadores…”
En ese mismo sentido abordo el tema de los despachos independientes que contrata el Infonavit, para que los trabajadores paguen los pasivos originados por sus patrones, cuando estos es responsabilidad de los empresarios, con la anuencia del propio Infonavit. La contratación de esos despachos además de ser ilegal también presionan a los trabajadores, con viviendas, con desalojarlos de sus casas por el atraso de las empresas en el pago, a pesar de que les aplican descuentos cada semana o quincena.
Luego de haber lanzado la huelga y de sacar algunos trapitos al sol y ante el miedo a una potencial ola huelguística que se les podía venir encima, los dueños del hotel Maralisa “decidieron” ponerle fin a la huelga que duró una semana y aceptar las condiciones que ponían los trabajadores (por medio de un acuerdo) para levantar la huelga.
Después de una larga semana en la que no percibieron ningún ingreso, los trabajadores decidieron llegar a un acuerdo con los patrones, acuerdo que por cierto obliga a los dueños a pagar el adeudo total y corregido de 3 millones de pesos a más tardar en un año, así como solventar de inmediato la entrega de uniformes, pago de becas a los hijos de los trabajadores y las propinas a las meseras. También cuatro guardias de seguridad fueron removidos del hotel ante la acusación de los trabajadores por hostigamiento laboral. Asimismo se pagaran los salarios caídos de los trabajadores por el tiempo que duró la huelga.
La fuerza de la clase trabajadora
Mentiría aquel que diga que el levantamiento de la huelga fue el resultado de la buena fe de los dueños del hotel, que gracias a su bondadosa actitud, hoy los trabajadores del hotel Maralisa están de nueva cuenta trabajando y contentos.
Y mentiría porque la realidad es otra, pues siendo dueños de varios hoteles, no se iban a arriesgar a que se fueran a huelga una cantidad importante de trabajadores, ni mucho menos que trabajadores de otros hoteles o de otros sectores tomaran el ejemplo del hotel Maralisa, ya que la crisis ha mermado a la clase trabajadora en su conjunto y el aplazar el fin de la huelga, les hubiera resultado contraproducente; asimismo actuaron bajo la presión de las autoridades del Estado, como de los demás empresarios, pues como a ellos les gusta decir, “ponían en riego la estabilidad social en Acapulco y saldrían afectados los turistas, principal sustento de ese municipio”.
Así que la victoria de los trabajadores del hotel Maralisa es una muestra clara de la fuerza de la clase trabajadora. Es más, hasta la CTM, conocida por su nula acción ante los ataques a los trabajadores, fue obligada por los mismos trabajadores a meter las manos al fuego por ellos. Así que después del gran triunfo de los trabajadores del hotel Maralisa no queda más que anotarle otra victoria a la clase trabajadora del país y otra derrota a la burguesía y a todos sus aliados.
Se ha ganado, pero lo más importante que sucede al término de la lucha, es que los trabajadores empiezan a sacan sus propias conclusiones, y es cuando empieza el proceso de toma de conciencia, se empiezan a preguntar quien gobierna y a favor de quien lo hace, y notan que nos es a su favor, sino al favor de un puñado de capitalistas parásitos, pero sobre todo se dan cuenta de que sólo luchando y erradicando la explotación del hombre por el hombre, se podrá tener un mejor nivel de vida. Se dan cuenta que solos y aislados no triunfarán en la transformación de la sociedad, que se necesitan organizar como clase para hacer frente a la burguesía.
Viva la huelga de los trabajadores del hotel Maralisa
Viva el proletariado internacional
¡Proletarios de todo el mundo uníos!
Compañero trabajador únete a Militante y lucha por la transformación socialista de la sociedad.