Los pasados 19 y 20 de noviembre se llevó a cabo el primer Congreso Nacional de Morena. En él participaron delegados de toda la República Mexicana y se debatió, entre otras cosas, si Morena debía convertirse en Partido Político.

El contexto en el cual se desarrolla dicho congreso es de mucha convulsión. La crisis económica golpea a diario a las familias de los trabajadores y las oportunidades de tener una mejor calidad de vida se desvanecen.

El desempleo, muy por el contrario de las cifras gubernamentales, ha aumentado considerablemente, pues en noviembre de 2012 este fenómeno alcanzó una tasa del 5.2%, cuando en diciembre de 2011 era del 4.5%. Por otro lado, la reciente aprobación de la contrarreforma laboral ataca severamente las condiciones laborales de los trabajadores al establecer el pago por hora de la jornada laboral, un ataque feroz a las organizaciones sindicales y un endurecimiento en extremo del ejercicio de derechos laborales como el de huelga, entre otras cosas.

A la par de lo anterior, los niveles de pobreza en nuestro país se dispararon para el año 2012, al pasar a 13 millones de mexicanos en extrema pobreza, 1.3 millones de personas más que en 2010. Bajo esas condiciones ahora en nuestro país más de la mitad de la población se ubica en el rubro de la pobreza.  Aunado a ello, durante el 2012, el 90.1% de los productos que conforman la canasta básica aumentaron. En un periodo de 10 años, el costo de la canasta básica ha pasado de tres mil 412, en 2002, a seis mil 570 pesos en 2012.

El gobierno no ve ni oye las demandas del pueblo, pretende cubrir con engorrosas propagandas televisivas sus artimañas y busca seguir aprobando contrarreformas que pretenden cargar sobre la espalda de los trabajadores una crisis que la burguesía misma ha generado.

En ese contexto a ojos de muchos trabajadores Morena se presenta como una alternativa de lucha dada su trayectoria de lucha que se remonta a los últimos 6 años dese su conformación como Convención Nacional Democrática (CND) a la actualidad.

Durante todos estos años Morena ha logrado conformar una estructura basada en comités de base o círculos de estudio en donde las bases han debatido constantemente sobre el andar del movimiento. Todo ello ha permitido tener una vida regular y también ha posibilitado una mayor participación por parte de las bases de Morena, sin embargo la necesidad de que estos espacios sigan abriéndose es fundamental para conformar un partido a la altura de las circunstancias.

Por una política revolucionaria

Para conformar dicho partido Morena debe luchar por fortalecer varios frentes. En primer lugar se debe de lanzar una enérgica campaña de afiliación acompañada de una fuerte agitación explicando la importancia de conformar el partido y participar en él y en la toma de decisiones.

Por otro lado Morena debe de dar un fuerte impulso a la creación de comités de base. No puede existir una comunidad, un municipio, una delegación, un centro laboral o una escuela sin un comité de base de Morena. En cada uno de ellos debe haber comités representativos de las bases los cuales serán encargados de convocarlos periódicamente, llamando a todas las bases a participar y a discutir la política del partido.

Morena debe de luchar por la salida de todos los elementos de derechas que empiezan a integrarse bajo falsos perfiles. En Morena no pueden existir elementos que coqueteen con la derecha y que intenten llevar al partido por la vía de las alianzas o acuerdos por debajo de la mesa, tal como lo hicieron en su momento los «chuchos» al interior del PRD.

El partido debe tener absoluto control de los dirigentes mediante los comités de base y deberán sujetarse a: elección directa y democrática de absolutamente todos los cargos al interior de Morena así como de sus candidatos a cargos públicos; diputado obrero, salario obrero: ningún cargo al interior del partido ni los de las diferentes administraciones bajo los futuros gobiernos de Morena deberá recibir un salario por encima del de un trabajador promedio calificado, por su parte los diputados y senadores, así como el resto de cargos obtenidos por elección popular, deberán entregar íntegros sus cheques de nomina a los responsables de finanzas del partido para que sólo se les regrese una cantidad similar a la del salario de un trabajador calificado, el resto del dinero se quedaría para desarrollar y fortalecer al partido. Lo que Morena necesita son dirigentes que vivan para el partido y no del partido; por la entrega de informes regulares de todos los dirigentes y los miembros del partido con cargos de elección popular que lleguen al conjunto de la militancia y comités de base; por la revocabilidad de los cargos: destitución en asamblea democrática de todo aquel dirigente, funcionario de algún gobierno de Morena o integrante del partido con un cargo de elección popular, que incurra en una política contradictoria a los intereses de la base de trabajadores de la ciudad y del campo.

Morena debe ser un partido combativo. Desafortunadamente la dirigencia ha optado por una política que ha hecho que, en últimas fechas, Morena sólo se movilice por motivo de elecciones, esto no puede seguir así. Morena debe tener una fuerte vinculación con todas las luchas de los trabajadores, de los campesinos y de los estudiantes adoptando sus demandas como propias y llamando a la masiva base de apoyo a movilizarse por ellas.

Morena debe de levantar un programa revolucionario que luche en contra de la explotación y a su vez por la transformación radical de la sociedad. Un programa que levante las demandas históricas de la clase trabajadora y del campesinado pobre y sus familias, y en el que se llame a los explotados a luchar para expropiar a los banqueros, a los empresarios, a los terratenientes y demás explotadores.

Morena debe luchar por aumento salarial, por seguridad social, por más y mejores empleos, por una educación pública, gratuita, científica y de calidad para los hijos de los trabajadores, debe luchar por vivienda, por la industrialización del campo y por el mejoramiento de las condiciones de vida de los sectores explotados de la sociedad, en pocas palabras Morena debe luchar por la transformación socialista de la sociedad.

Al respecto del PRD, Morena debe lanzar una política de unidad en la acción y por la democratización de dicho partido. Morena debe establecer una alianza con los sectores democráticos del PRD para purgar a este último partido de elementos de derecha y que trabajan al servicio del régimen.

Únete a Militante

Los marxistas de Militante hemos defendido desde siempre estos elementos tanto en Morena como en el PRD. Desde nuestro punto de vista la única manera de transformar la sociedad en la que vivimos es luchando por derrocar a la burguesía, a su gobierno y a sus partidos, el PRI y el PAN.

El capitalismo es horror sin fin, no existen dentro de él empresarios honestos ni reformas a medias. La sociedad está dividida en clases sociales, en donde una de ellas impone su voluntad sobre la otra para explotarla y vivir parasitariamente. Es por ello que necesariamente la conformación de un partido que verdaderamente pretenda solucionar los problemas de hambre, desesperanza y pobreza que sacuden a nuestro país, tiene que pasar por el reconocimiento de que el capitalismo es el principal responsable de todo ello y que por tanto tiene que ser derrocado.

Desde Militante invitamos a todos los simpatizantes e integrantes de Morena a integrarse a nuestras filas para luchar, junto con nosotros por estas y otras demandas. Es momento de que la clase trabajadora ponga un alto a la nefasta política de la derecha y tome las riendas de su destino.

México no es el único país en donde los ataques de la burguesía son feroces, lo mismo sucede en otras naciones de América Latina, Europa o Asia. Ahora mismo los planes de austeridad en los países europeos están dejando en la calle a millones de personas y nuestro país no está exento de ello. Por más que los  organismos financieros cacaraqueén que viene la recuperación y que ya estamos a un paso de salir de la crisis lo cierto es que la aprobación de las contrarreformas laboral o educativa reflejan lo contrario.

Ellos no cederán con su política de ataques, nosotros no podemos ni debemos ceder en nuestra lucha por una sociedad libre de explotación, una sociedad socialista.

Por un Morena revolucionario

Únete a la Tendencia Marxista Militante y lucha por una sociedad socialista