El plazo que definió la Asamblea de Técnicos y Profesionistas de la Costa Michoacana para que la empresa Arcelor-Mittal reinstalara a los 22 trabajadores despedidos por razones políticas se venció el pasado jueves 31 de julio, fecha en la cual se tendría que haber realizando la mesa de negociaciones, no obstante la empresa en una clara muestra de desprecio no asistió.

La respuesta de los filiales fue una vez más de rabia y coraje ante este ofensivo trato, si ya desde días antes era evidente que sin una acción contundente la patronal seguiría sin ofrecer nada, este último hecho lo ha demostrado nuevamente. Al vencerse el plazo para que la empresa resolviera, la única alternativa viable que quedaba era la realización del paro, ello lo comprendieron los trabajadores y por eso el ambiente para realizar esta acción era más que favorable.

La empresa al ver la reacción combativa que había provocado su actitud, intento corregir y en menos de 24 horas hizo del conocimiento de los despedidos que las liquidaciones estaban listas. Con este ofrecimiento la empresa buscaba desorientar al movimiento, dividir a la asociación (entre aceptar la liquidación ó continuar hasta obtener la reinstalación) y sobre todo crear un ambiente de desmoralización que evitara el paro. Como señalamos anteriormente, el solo hecho de debatir la posibilidad del paro, es ya un elemento que pone bastante nerviosa a la patronal, y así fue como ocurrió.

A partir de ese momento la iniciativa recaía del lado de los trabajadores, la empresa se encontraba en una posición en la cuál intentaba frenar el movimiento, y para ello estaba dispuesta a ofrecer las liquidaciones, cosa a la que se había negado rotundamente semanas antes. Era necesario dar el siguiente paso y organizar efectivamente el paro, seguramente de haber seguido la organización del paro se hubieran ofrecido liquidaciones mayores a las que se prometieron y de realizar la acción la empresa no tendría más remedio que reinstalar a los despedidos, no por su voluntad si no por la fuerza de la organización obrera.

Desafortunadamente en vez de seguir la organización del paro, se decidió desconvocar la acción y confiar en la palabra de la patronal de entregar las liquidaciones otorgando un nuevo plazo para ello (viernes 15 de Agosto).

Con esta decisión la empresa ha logrado parte de sus objetivos; al menos de forma inmediata a conseguido que el paro no se realice, la demanda la ha reducido a las liquidaciones descartando las reinstalaciones, pero lo más importante es que ha orillado a los trabajadores a su propio terreno, limitando sus acciones e imponiéndoles las negociaciones como medio para solucionar sus demandas. En este terreno los trabajadores somos vulnerables ante el patrón, estaremos sujetos a sus condiciones y a sus intereses. La patronal se esmerará por dividir a la asociación, jugando con las necesidades económicas de los despedidos, intentará mermar la autoridad y prestigio de la asociación, los trabajadores no debemos de caer en su juego, debemos de llevar la lucha a nuestro propio terreno y actuar con nuestros propios métodos.

La lucha aun no ha terminado, la empresa no ha otorgado más que promesas para los despedidos, y aunque no es descartado que entregue las liquidaciones estas intentarán ser una garantía de que la asociación no volverá a “dar problemas”. Los trabajadores no debemos de perder de vista nuestros intereses, la lucha por la reinstalación es en el fondo la lucha por la defensa de la organización obrera, debemos de mantener en alto la bandera de las reinstalaciones insistiendo que estas solo se lograrán con acciones como el paro.

Los patrones no están interesados en mejorar nuestras condiciones de vida, sus beneficios son nuestras carencias, nuestros salarios son ridículos en comparación con la ganancia que ellos se apropian. Las demandas obreras no se obtendrán con amables acuerdos con la patronal si no con la fuerza de la clase obrera organizada.

Es necesario retomar la iniciativa y comenzar a organizar brigadas de denuncia y solidaridad con la Asociación, informar a todos los filiales y sindicalizados de la intención de la patronal por dividir y desorganizar a la Asociación, convocando a un paro de 24 horas en la siderúrgica por la reinstalación de los despedidos y por la homologación de las condiciones laborales, la correlación de fuerzas sigue siendo favorable a los trabajadores, la clave está en utilizar los métodos de la clase obrera.

¡¡Por la reinstalación de los 22 despedidos!!
¡¡ Ninguna confianza en la patronal, Total confianza en la fuerza de la Asociación!!
¡¡Por un paro de 24 horas en defensa de los derechos laborales y por la reinstalación de los despedidos de la siderúrgica!!