¡No nos callen más, déjenos gritar!
Hoy me levanté temprano, me quité las lagañas de los ojos y los prejuicios hacia mi aspecto. Me puse una falda, no tan corta porque en estas mañanas lluviosas hace frío afuera. Salí de la casa y me dirigí al camión que me acerca a mi escuela. Como la mayoría de mis trayectos en...