¡Derrotar el 155 y la represión franquista con la movilización masiva!
La proclamación de la república catalana por el parlament de Catalunya ha provocado la reacción inmediata del Estado, del gobierno del PP y de sus aliados, Ciudadanos y el PSOE.
El intento de suprimir la voluntad de un pueblo que se expresó el 1 de octubre ejerciendo su derecho a decidir a pesar de una violencia policial brutal, y tras una huelga general histórica dos días después, es la respuesta de un Estado heredado del franquismo y de los partidos que sostienen el régimen del 78.
Los marxistas revolucionarios, contrarios a cualquier tipo de opresión nacional y de clase, consideramos que la lucha por la república catalana tiene que estar ligada a un programa político y de acción contra los recortes y la austeridad, que rompa con la lógica del capitalismo y con el dominio de la oligarquía, tanto española como catalana. La república catalana debe ser del pueblo, de los oprimidos, de la juventud y de los trabajadores. Por eso no podemos dejar esta república y su defensa en manos de los políticos burgueses del PDeCAT que velan por los intereses de los privilegiados. Luchar por una república que defienda las aspiraciones de la mayoría es parte de la lucha por transformar la sociedad, por el socialismo.
La clase trabajadora debe ser protagonista fundamental en el combate contra la represión y por la república catalana, y para ello hay que ligar esta causa a una política que cree empleo de calidad con salarios dignos, que elimine la precariedad y los desahucios, que defienda la sanidad y la educación públicas. Una república que acabe con el sabotaje económico de los capitalistas catalanes nacionalizado la banca y las grandes empresas.
Ésta es la única manera de conquistar la república y defenderla, asegurando que la enorme fuerza de la clase obrera catalana se moviliza para derrotar la ofensiva represiva del Estado y del gobierno.
La burguesía española y la catalana, los medios de comunicación del sistema, todos los partidos del régimen del 78, la judicatura, las fuerzas de seguridad y la monarquía se han unido para someter la voluntad de millones de ciudadanos, jóvenes y trabajadores de Catalunya. Y lo hacen de la manera en que la clase dominante española enfrenta situaciones que amenazan la estabilidad de su sistema y su poder político y económico: utilizando la violencia y la coacción del Estado para asegurar el orden establecido.
La clase dominante española y catalana ven con terror la proclamación de la república catalana, y la razón no es sólo porque quebraría la idea de España una, grande y libre. Saben que esta conquista del pueblo sería el preludio de una lucha aún más intensa y trascendental a favor de los oprimidos, contra la dominación de los capitalistas, contra el orden social establecido y por una república socialista en Catalunya y una república socialista federal basada en la unión libre y voluntaria de los pueblos y naciones que componen actualmente el Estado español. Una lucha que ya está conquistando la solidaridad activa de las masas oprimidas de Europa y de todo el mundo.
Visca Catalunya lliure, republicana i socialista!