El pasado 21 y 22 de mayo llevamos a cabo el XX Congreso de la sección mexicana de Izquierda Revolucionaria Internacional. Este Congreso se enmarca en una época de grandes cambios internacionales: la escalada de la lucha interimperialista que se libra en territorio ucraniano, casi década y media de crisis económica, la crisis sanitaria más fuerte en los últimos 100 años que ha cobrado la vida de más de 13 millones de personas en todo el mundo, la revolución y contrarevolución en América Latina, sólo por mencionar algunos.    

Como resultado de la bancarrota del sistema, así como de sus medidas para solucionar cualquiera de los anteriores aspectos, vemos insurrecciones, revoluciones y todo tipo de manifestaciones contundentes alrededor del planeta.

La guerra imperialista y lucha de clases

La primera parte de nuestro debate se centró en las  perspectivas internacionales, la introducción corrió a cargo del compañero Miguel Campos del Estado Español, quien profundizó sobre la pérdida del equilibrio capitalista, la continuidad de la política y la batalla comercial interimperialista por otros medios, como la guerra, las crisis de la hegemonía estadounidense y su carácter reaccionario y agresivo que ha venido preparando este escenario de guerra en Ucrania con el armamento y adiestramiento de batallones fascistas y descubriendo la mentira de la “resistencia” como mera propaganda otanista.

Señaló los indicios de una nueva crisis económica aún mayor, la enorme e hipócrita propaganda belicista de la OTAN, así como también del régimen de Putin. También abordamos los acontecimientos revolucionarios en América Latina; mostrando cómo al final, el imperialismo va de fracaso en fracaso impotente ante la rebelión de la clase trabajadora en el continente.

Durante el desarrollo del Congreso se dieron sobradas muestras del contexto internacional de revolución y contrarrevolución en el que nos encontramos. Con la asistencia de nueve camaradas internacionales -Estado Español, Alemania, Venezuela y Portugal- se profundizó en el origen, desarrollo y probables consecuencias de la guerra interimperialista en Ucrania, y cómo esta guerra, reaccionaria por ambos bandos, sólo expresa el inicio de una época de confrontación aún más dura y aumento de los ataques a la clase trabajadora mundial teniendo inevitables efectos en la rebelión de las masas contra este sistema decrépito que sólo busca recomponerse a costa de las vidas de las y los oprimidos.

Bárbara Areal, integrante del Comité Ejecutivo Internacional de Izquierda Revolucionaria Internacional (IRI), explicó profundamente el carácter reaccionario de la lucha interimperialista y la magnitud de la batalla que implicaría un cambio de estafeta en la hegemonía mundial, sólo comparable con el tortuoso camino que significó para las masas de trabajadores, jóvenes, campesinos, mujeres y niños la conquista de este galardón por EEUU sobre Inglaterra, después de dos Guerras Mundiales y millones de muertos.

También nos dio datos contundentes del avance chino en muchos aspectos de la economía internacional y cómo al mismo tiempo hay una caída del control económico de EEUU, marcando una tendencia de clara amenaza a la hegemonía estadounidense. También explicó cómo todo esto ha sido gracias a la terrible explotación de la enorme clase trabajadora china.

Este carácter tan complejo y crucial de la época que vivimos nos ha llevado a estudiar y evitar las formulaciones generales, para tener una perspectiva más viva y fina de los acontecimientos. Para nosotros en Izquierda Revolucionaria, los Congresos y documentos que elaboramos no son un ejercicio superficial, ni una práctica intelectual academicista, si bien nuestro método y estudio es riguroso, el objetivo principal es orientarse políticamente y actuar en la lucha de clases empujando la vía revolucionaria y la ruptura con el sistema capitalista. Analizamos la época para actuar e incidir en ella.

La participación de la compañera Katharina de Alemania, fue muy gráfica de la crisis de la Unión Europea y el terrible retroceso que los trabajadores alemanes y de toda la región están sufriendo en sus condiciones laborales, mientras las tensiones entre los países europeos aumentan y el presupuesto público se destina a la carrera armamentista. Al finalizar su intervención, insistió en la enorme importancia de seguir construyendo una organización internacional e internacionalista, que ponga por encima de la propaganda de guerra los intereses de clase del conjunto de las y los trabajadores del mundo.

La participación de Henrique, sobre Brasil dejó muy en claro que el avance de China no tiene nada de progresista. El financiamiento que ha hecho del gobierno de Bolsonaro, refleja que el interés de esta potencia mundial es sustituir el papel de gendarme que juega EEUU. También explicó cómo ante el descontento, pero también ante la falta de una alternativa revolucionaria pueden resurgir sujetos como Lula como un intento de la burguesía de dar salida al hartazgo empleando personajes que no pretenden arrebatarles sus privilegios. Explicó la fortaleza del movimiento obrero y lo cruda que ha sido la pandemia para los oprimidos de Brasil.

Andrea y Lupe realizaron excelentes intervenciones sobre Colombia y Chile, dos países en los que la clase obrera puso contra las cuerdas a la burguesía y al imperialismo, crearon órganos de poder obrero poniendo en jaque al Estado en diferentes aspectos y con una orientación revolucionaria pudieron haber tomado el poder del conjunto del país, sin embargo, la dirección de esas insurrecciones, nuevamente, como en muchos países lo han hecho, renunciaron a construir una nueva sociedad por intentar hacer el papel de doctores del capitalismo, descarrilando el descontento hacia la vía parlamentaria. Aun así, el proceso no está cerrado, la clase trabajadora no ha sido derrotada y podremos ver nuevas luchas y nuevas oportunidades para darle un cauce revolucionario muy pronto. 

El compañero Félix de Venezuela describió las consecuencias de no llevar los procesos revolucionarios, como el que vivió Venezuela, hasta sus últimas consecuencias buscando una salida socialista. También analizó los retrocesos en las conquistas conseguidas durante el periodo de Chávez y como la única alternativa es el rearme ideológico y organizativo del movimiento, así como el desarrollo de los acontecimientos a escala internacional. 

Aldahara habló sobre el Oriente Medio y las convulsiones sociales en medio del intervencionismo imperialista y como pese a que han pasado algunos años después de la primavera árabe el proceso de giro a la izquierda continúa y no está cerrado.

Rafael describió el avance de China en AL, los principales sectores de inversión y cómo no hay un imperialismo bueno, ya sea chino o estadounidense, todos buscan la dominación de la región y la máxima explotación, ya sea en Asia, África o América Latina.

Un gobierno histórico resultado de un periodo histórico

Durante la segunda sesión del sábado abordamos la situación política y económica del país y su perspectiva. México no ha sido la excepción en esta época convulsa, millones de trabajadores irrumpieron en el terreno electoral en 2018 para echar al prianismo del gobierno, consolidando así la entrada a un nuevo periodo de lucha de clases en el país.

Esta nueva época, caracterizada por la necesidad de un programa revolucionario para arrebatar cualquier conquista por mínima que sea frente a la profunda crisis que atraviesa el sistema, ha demostrado una y otra vez que las reformas, avances o apoyos hasta ahora implementados no son suficientes para saldar las necesidades de la población, que el “capitalismo con rostro humano” es más utópico que cualquier lucha por expropiar a los expropiadores.

Caracterizamos al gobierno de AMLO, su política conciliadora y sus consecuencias, el alarmante fortalecimiento de las FFAA, la continuidad de los megaproyectos de despojo y explotación que han cobrado la vida de más de 90 defensores del territorio, la continuidad de los asesinatos a periodistas y crímenes contra las mujeres, así como la imposibilidad del gobierno federal de parar al crimen organizado y la precariedad, todo mientras AMLO mantiene más del 60% de popularidad.

Explicamos cómo los resultados electorales de 2018 representaron fundamentalmente el ánimo feroz de la clase obrera de impedir más gobiernos de la derecha. Sin embargo, el gobierno y su partido no dejan de abrirle las puertas y de permitirle el oxígeno necesario para su reorganización y fortalecimiento. Estudiamos a fondo la crisis de Morena y su proceso de burocratización, así como reconocemos el esfuerzo titánico desde las bases honestas de luchar por convertirlo en una herramienta de la izquierda combativa, sin que esto aún se reproduzca dentro de la dirección del partido ni en ninguna de las corrientes que predominan.

Enmarcamos al gobierno actual y su partido Morena en la crisis del reformismo a escala mundial, un fenómeno también característico de la época de declive capitalista en dónde no hay espacio para reformar al sistema y los partidos que se limitan a esta intensión terminan descomponiéndose y asimilándose rápidamente al statu quo.  

Explicamos como el giro a la izquierda no se ha detenido, manifestándose en sectores nuevos que salen a la lucha, en la oleada de luchas contra el charrismo sindical, en el accionar del movimiento feminista pese a la pandemia y la represión, y en como la juventud se ha puesto en marcha apenas con la vuelta a clases presenciales, por ello es más urgente que nunca construir una izquierda revolucionaria para unificar y fortalecer todas estas luchas.

Al final de la sesión del sábado realizamos una colecta económica donde prácticamente triplicamos el objetivo propuesto, lo cual es un gran indicador de la confianza y el compromiso con el que construimos a Izquierda Revolucionaria como una herramienta de lucha para participar en el movimiento social e impulsar la lucha anticapitalista.

Construyendo IR

El segundo día realizamos un balance sobre el trabajo realizado hasta ahora, así como trazar las líneas de nuestras futuras intervenciones y tareas dentro de las luchas donde participamos, destacando el movimiento feminista y lgtbi+, la lucha de la juventud, la defensa del territorio, así como las expresiones de rebelión sindical y la clase trabajadora.

Explicamos cómo durante la pandemia no paramos nunca nuestra participación, al contrario, desarrollamos una de las campañas más difíciles y exitosas que hemos llevado adelante en estos 30 años de existencia: la campaña #NoEstasSola, con la que arrebatamos una victoria al machismo institucional con 83 años y seis meses de cárcel para un violador recurrente.

También ha sido en estos años tan duros que comenzamos nuestro trabajo de publicación de libros de la Fundación Federico Engels, la editorial más grande de marxismo en lengua castellana. Dedicamos también un espacio a explicar la importancia de la prensa independiente, la propaganda y contar con la autofinanciación como ejes centrales de nuestra organización. 

Por otro lado, la asistencia de invitados, los saludos y la colecta expresó los fuertes vínculos que hemos tejido con el movimiento en diferentes sectores, pero siempre los más combativos y proletarios, como la defensa del territorio, la lucha feminista, el movimiento jornalero, etc. Recibimos saludos internacionales y también nacionales como del compañero Lorenzo del SINDJA o Silvia del movimiento feminista y en defensa del territorio.

Nuestro Congreso nos reafirma y desde Izquierda Revolucionaria seguiremos luchando, aún con más compromiso y combatividad, hombro con hombro con nuestra clase, para quitarnos de encima la terrible loza que nos han echado encima con la pandemia y la crisis, saldremos a las calles nuevamente con el impulso de saber que no hay otra alternativa que la lucha organizada, inspirados en las enormes batallas de nuestras hermanas y hermanos en Chile, Colombia, Bolivia, Ecuador, Estados Unidos y  el mundo entero, que no se han parado frente a la guerra que nos declaró la burguesía. Solos somos impotentes ante el enemigo que enfrentamos, pero juntos y organizados somos más fuertes.

¡Súmate a Izquierda Revolucionaria y lucha por el socialismo!