Las semanas que sucedieron al paro de 48 horas en la Facultad de Estudios Superiores Aragón el pasado 16 y 17 de septiembre han estado llenas de actividad e inquietud entre los estudiantes, quienes ante el descontento que genera la situación de crisis nacional buscan una forma organizada y consciente de manifestarse.

Durante la semana posterior al paro se convocaron asambleas informativas con el fin de que los compañeros estudiantes, docentes y trabajadores pudieran informarse, realizar un balance de la actividad y a su vez proponer las siguientes actividades de protesta y discusión política. Sin embargo, a pesar del genuino interés de una parte del sector estudiantil, otra parte fue coaccionada por profesores y autoridades administrativas del plantel obstaculizando la realización de esta actividad, haciendo uso de rumores tales como el cierre arbitrario de la escuela el 2 de octubre o la realización de un paro indefinido, igualmente al margen de la participación democrática de la mayoría de la comunidad.

Pese al intento de desmoralizar y apagar la inquietud de los jóvenes muchos aragoneses se mostraron dispuestos a trabajar en foros, mesas de debate y discusiones, pues el descontento con las reformas de la derecha y las precarias condiciones de estudio en la FES, son un motivo más que suficiente para buscar una solución que las autoridades y las instituciones burocráticas no han podido otorgar.

La histórica manifestación del 2 de octubre fue otra muestra del ánimo que se respira no sólo en Aragón sino entre toda la juventud de las escuelas públicas, quienes ven que su futuro es totalmente incierto y poco alentador, por ello adoptan las consignas de la clase trabajadores en lucha, abrazan las protestas de la CNTE, el SME, y la defensa del petróleo, aferrándose a no perder las conquistas de los obreros durante décadas pasadas.

Ni la represión policiaca, ni el linchamiento mediático o la falta de dirección de las organizaciones caducas y parasitarias que abundan en la Facultad lograron apagar el entusiasmo con el que los compañeros salieron a las calles, por el contrario, aumentó la indignación, el repudio a las medidas que la derecha toma para apagar la protesta civil pacífica, y dejó bien firme en ellos la necesidad de una organización cuyas ideas y métodos sean estratégicamente superiores.

La lucha de la juventud ha sido parte de la vanguardia de la lucha de clases en países como Canadá, Chile, Brasil y España, esto no es una coincidencia, es el resultado de los ataques a la vida de los trabajadores, a las condiciones de trabajo más básicas y al futuro de la juventud. México no es la excepción y estas jornadas de lucha lo han dejado claro.

Tomando en cuenta este ambiente de lucha, el Comité Estudiantil en Defensa de la Educación Pública (CEDEP) de la FES Aragón ha impulsado círculos de discusión política, periódicos murales y charlas rumbo a la construcción de una organización de lucha, que permita a los jóvenes comprender la lucha estudiantil desde un punto de vista de clase, dentro de un escenario amplio y cambiante que es indispensable asimilar para saber cómo dirigir la lucha juvenil.

¡Unidos y organizados venceremos!

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