El pasado domingo 20 de Marzo en el Auditorio Nacional, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) relanzó el Movimiento de Regeneración Nacional, mejor conocido como MORENA. Junto con ello presentó el nuevo Proyecto Alternativo de Nación el cual a lo largo de 50 puntos define el programa de gobierno que impulsará de llegar a la presidencia de la república tras las elecciones del 2012. Los 50 puntos del Proyecto Alternativo de Nación retoman y detallan aspectos planteados en los 10 puntos del proyecto alternativo de nación, tema sobre el cuál Militante ha publicado un extenso artículo de análisis (AMLO rumbo a la elecciones del 2012: por un programa socialista http://militante.org/amlo-rumbo-elecciones-2012)
Las ideas que AMLO enfatizó en su discurso reflejan no sólo su programa de gobierno, sino la política que los dirigentes del MORENA impulsarán en el movimiento. Por ello es pertinente que la base de apoyo del MORENA y del PRD debata y se involucré en la definición de la táctica a seguir rumbo al 2012 y en la elaboración de la postura que el movimiento debe tener hacia la burguesía, el imperialismo norteamericano, entre otros temas que son de vital importancia para la lucha.
Derrotar a la oligarquía
Al inicio del discurso y antes de terminarlo AMLO señaló un aspecto fundamental para el movimiento, poniendo cómo una condición para aplicar el Proyecto Alternativo de Nación, la derrota de la oligarquía: “En primer lugar, es ineludible derrotar a la oligarquía en el terreno político y por la vía pacífica para establecer en México una verdadera democracia, un gobierno del pueblo y para el pueblo”.
Antes de concluir el discurso fue más enfático en este puto y señaló cual sería la actitud de la “oligarquía” -cómo él llama a los empresarios más acaudalados y a la burocracia política que defiende sus intereses- una vez que se tratara de implementar el Proyecto Alternativo de Nación: “Tengamos presente que la oligarquía seguirá existiendo, que no los vamos a desaparecer o a desterrar, la gran diferencia será que ellos ya no tendrán el mando, que habrá un gobierno del pueblo y para el pueblo. Pero como es lógico, siempre estarán presionando para mantener y acrecentar sus privilegios, y por eso es indispensable contar con el apoyo y la participación organizada del pueblo. No olvidemos que esta lucha no es nada más para llegar al gobierno, por cargos públicos, sino para llevar a cabo la transformación del país”.
Esta perspectiva es totalmente correcta, el movimiento organizado en MORENA, donde millones de trabajadores del campo y la ciudad ven reflejadas sus aspiraciones, tiene que considerar que un cambio en la política y en la economía que mejore las condiciones de vida de las masas ha sido y seguirá siendo rechazado por la oligarquía; empresarios, banqueros, terratenientes, especuladores, la burguesía y sus representantes políticos enquistados en el Estado, han sido y seguirán siendo enemigos irreconciliables de nuestro movimiento.
Pero también y de manera muy asertiva AMLO señaló la fortaleza del movimiento: “También es importante que no nos dejemos apantallar, porque si bien es cierto que esta minoría rapaz ha llegado a acumular mucha riqueza mal habida y son los dueños de los medios de comunicación más influyentes del país, se trata de gigantes con pies de barro, porque no son más que una pandilla de delincuentes de cuello blanco. Pensemos que en nuestro movimiento participan millones de hombres y mujeres con firmes convicciones y elevados valores morales. Y esto es lo mero principal. Con mexicanos así, con gente como ustedes, lo imposible es posible. Además, ya está despertando más gente. Y me consta que se están apuntando diariamente alrededor de 10 mil ciudadanos como protagonistas del cambio verdadero”.
Reconocer que el MORENA es un movimiento antagónico a los intereses de los capitalistas y de su Estado, que para triunfar y aplicar su programa debe derrotar a la burguesía, es un gran acierto. Que los capitalistas están en todo momento “presionando para defender y acrecentar sus privilegios” y que los trabajadores organizados podemos vencerlos cómo a “gigantes con pies de barro” es una verdad indiscutible.
Ninguna vacilación en la lucha contra la oligarquía
Contrastando totalmente con la línea de argumentación inicial y final del discurso, a la hora de señalar cuáles son los ejes fundamentales del programa de MORENA, AMLO señaló importantes aspectos que desafortunadamente no se corresponden con las conclusiones señaladas anteriormente.
Sobre las medidas a tomar hacia los monopolios señaló; “Si Carlos Slim, como cualquier otro ciudadano, quiere tener un canal de televisión, no tendrá problemas, porque queremos que no sólo haya dos televisoras que acaparen toda la audiencia sino 10, 20, las que sean técnicamente posibles. De la misma forma, si Emilio Azcárraga, Ricardo Salinas Pliego o cualquier otro empresario desea participar en la telefonía, podrá hacerlo, porque no debe haber, bajo ninguna consideración, monopolios”.
La política que MORENA defiende hacia los capitalistas más poderosos del país es fundamental, ya que son precisamente los Slim, Azcárraga, Salinas Pliego, etcétera, los que encabezan “la pandilla de cuello blanco” que “presionan por acrecentar sus privilegios” esta es la oligarquía que “debemos derrotar”. Los capitalistas no son mansos corderos a los cuales se les pueda domesticar o regular, presionándoles con sanciones administrativas para que cedan su poder y privilegios. En América Latina estos mismos capitalistas antes que permitir que un gobierno de izquierda afecte sus millonarios negocios, han intentado derrocarlos y reprimir la organización de la clase obrera por medio de Golpes de Estado, en contubernio con las transnacionales y el imperialismo norteamericano.
Precisamente es la experiencia de América Latina la que ha llevado a los capitalistas a la siguiente conclusión: AMLO no debe de llegar a la presidencia. Este es un aspecto que unifica al imperialismo y la burguesía nacional, por eso tiene razón AMLO cuando señala que para aplicar el programa de MORENA previamente se debe derrotar a la oligarquía, por eso es una tarea indispensable que los dirigentes del movimiento de regeneración nacional señalen inmediatamente el cómo y con qué métodos se va a derrota previamente a la oligarquía. Actualmente esta es la tarea más apremiante para el movimiento. Cualquier señalamiento, cómo el que hiso AMLO hacia Slim, Azcárraga, y Salinas Pliego, infunde confusión dentro de las filas del movimiento, al mismo tiempo que la burguesía lo toma en cuenta cómo una vacilación y síntoma de debilidad de MORENA y de su dirigente más importante.
Cualquier intento de presentar a MORENA cómo un movimiento que “representa todos los intereses” donde “todos tienen cabida” incluidos los capitalistas, infundirá desconfianza entre las masas, confusión y escepticismo entre la vanguardia del movimiento obrero, además de desprecio por parte de los capitalistas, los cuales no obstante seguirán el juego hasta donde les convenga para desprestigiar al movimiento. Dentro de esta línea es que algunas cámaras empresariales aceptaron “dialogar” con Andrés Manuel en los últimos meses. MORENA es el resultado de un movimiento proletario de masas que se ha mantenido heroicamente organizado durante los últimos cinco años; donde las bases se han pronunciado una y otra vez por una política contundente en contra de Calderón y de todos los intereses capitalistas que lo impusieron, incluidos por supuesto los intereses de Slim, Azcárraga y Salinas Pliego. ¡No hay nada que negociar con la oligarquía! ¡Contra los monopolios capitalistas, la expropiación bajo control obrero!
La política de MORENA ante el imperialismo norteamericano
Es sintomático que el primer punto del Proyecto Alternativo de Nación que presentó AMLO lo haya dedicado a la relación entre el gobierno de México y EUA. En este sentido dijo: “La relación con los Estados Unidos se fincará en el respeto a la soberanía y en la cooperación para el desarrollo”; además señaló que se revisaría el Tratado de Libre Comercio y se defenderán los derechos laborales de los mexicanos que radican en Estados Unidos.
Vale la pena señalar que el gobierno norteamericano, con Obama a la cabeza, es el representante de la oligarquía más poderosa que oprime a la clase trabajadora a nivel mundial. Las recientes publicaciones de wikileaks ilustran lo que siempre ha existido el control del imperialismo sobre la política y la economía de México, donde las decisiones más importantes de la clase dominante en nuestro país, incluidas los relacionados con los resultados electorales, se acuerdan o se imponen desde los EUA.
La relación existente entre EUA y México es una relación de dominación de un país imperialista sobre uno con una economía dependiente. El gobierno y las transnacionales norteamericanas son de hecho parte de la oligarquía que impuso a Calderón y por lo tanto también son un enemigo a tener en cuenta, pero cómo ha señalado AMLO, no debemos “dejarnos apantallar”. Las masas en nuestro continente y en el Magreb han infundido las derrotas más significativas al imperialismo norteamericano probablemente desde la derrota de su ejército en Vietnam, echando por tierra a dictaduras y gobiernos títeres, demostrando la fuerza y el poder de la clase trabajadora movilizada.
Es correcto que MORENA tome en cuenta el papel que va a jugar el gobierno norteamericano de cara a las elecciones del próximo año. En este sentido MORENA debe de extender su red de organización a los más de 10 millones de migrantes mexicanos que han sido expulsados del país por la política del PRI y el PAN, reivindicando sus derechos democráticos y laborales, además de ser un factor de presión para contrarrestar la influencia del gobierno yanqui sobre las decisiones de la clase trabajadora en nuestro país.
La fuerza del MORENA debe ponerse en acción
Al cierre del mitin AMLO pasó revista a las fuerzas del MORENA, señalando que:
“Ya contamos con dos mil comités municipales integrados por 14 mil ciudadanos, mujeres y hombres libres, conscientes y comprometidos con esta noble causa.
También hemos decidido crear un comité en cada una de las 65 mil secciones electorales del país, hasta ahora llevamos 25 mil, en los que participan cerca de 100 mil ciudadanos. A finales de este año, cuando lleguemos a la meta de los 65 mil comités seccionales, estarán participando alrededor de 250 mil dirigentes de base en todo el territorio nacional. Para entonces habremos construido la organización más importante que se haya visto en la historia de México”.
El cúmulo de fuerzas que agrupa el MORENA es un reflejo de la enorme disposición de la clase trabajadora por acabar con el gobierno de Calderón y su política, si a esto le agregamos la conclusión de AMLO –y que el movimiento comparte- de que es necesario derrotar a la oligarquía cómo una condición necesaria para llevar adelante el Proyecto Alternativo de Nación, cave hacernos las siguientes preguntas: ¿Qué deben hacer los dos mil comités municipales que agrupan a 14 mil compañeros, para derrotar a la oligarquía mientras llegan las elecciones del 6 de julio de 2012? ¿Cómo pueden y que deben hacer los 25 mil comités seccionales que agrupan a cerca de 100 mil seguidores de AMLO, ante los actuales ataques de Calderón contra electricistas y mineros? ¿No acaso podríamos comenzar a infligir derrotas decisivas al gobierno de Calderón movilizando esa enorme fuerza a nivel nacional, para llevar a la victoria la lucha de todos aquellos sectores que están siendo atacados por Calderón y la burguesía? ¿No acaso una victoria en estos terrenos nos pondría en condiciones más que favorables para enfrentar la coyuntura electoral del 2012? ¿Por qué no organizar una huelga general por un aumento salarial de emergencia ante la carestía de la vida, agitando en todos los sindicatos, incluidos los que están bajo el control priista? ¿Por qué no emprender una ofensiva decisiva para quitar a los “Chuchos” de la dirección del PRD, asegurando que la candidatura de AMLO sería respaldada por este partido? ¿No acaso estas acciones representarían una derrota importante para Calderón, el PRI, el PAN, y sus compinches “Chuchos”, lo que colocaría magníficamente a nuestro movimiento de cara a julio del 2012?
AMLO y el MORENA se han puesto un objetivo muy ambicioso, agrupar a 4 millones de miembros y simpatizantes del proyecto de Regeneración Nacional, esto es del todo viable, pero la lucha de clases no se desarrolla simplemente de forma aritmética, para generar una base de apoyo activa, militante, dispuesta a defender el voto hasta sus últimas consecuencias, que es cómo se necesitará defender los votos, se requiere de movilización, se requiere frenar inmediatamente los ataques del gobierno de Calderón y del PRI contra los trabajadores, esto tendría el efecto que tuvo la derrota de Fox al querer desaforar a Andrés Manuel. Fue esa enorme movilización la que dio el grito de batalla a la clase trabajadora, la que infundió confianza en los mineros, en los profesores y campesinos pobres de Oaxaca; fueron estas batallas y victorias las que ensancharon el camino del 6 de julio del 2006.
El movimiento actualmente está más organizado, es más consiente de sus intereses históricos y de cómo defenderlos, pero requiere ponerse en acción contra todos los males que aquejan y oprimen a las masas, de esta manera el movimiento llegaría no solo a 4 millones de afiliados, además de la cantidad, el ambiente sería aun más combativo, de lucha irreconciliable contra los capitalistas, este es el estado de ánimo que se requiere para vencer y que la dirección tiene que promover entre las filas de MORENA.