Los trabajadores estamos metidos en una de las peores crisis de la historia del capitalismo mundial. Todo es cada vez más caro, tenemos una nueva Ley Federal del Trabajo que ha legalizado la más descarada explotación de parte de la burguesía, los servicios de salud son ineficaces, el proceso de privatización de la educación sigue avanzando al igual que los energéticos, el desempleo cada vez es mayor, la inseguridad está a la orden del día. ¿Quién nos ha metido en esta crisis? Pues la gran burguesía que sigue demostrando su incapacidad para administrar la economía, y para no ver disminuidas sus ganancias, promueve la privatización de empresas públicas, recortes presupuestarios y salariales. En México, los trabajadores de las manufacturas generan en sólo 9 MINUTOS el salario mínimo de $60.33 pesos que reciben como pago por parte del patrón. Lo que se produce (plusvalía) en las siete horas restantes de trabajo va a parar directamente a manos de la burguesía.

Ante estas condiciones los trabajadores exigen legítimamente una mayor parte de la plusvalía generada por ellos, para tratar de resarcir su poder de compra, obteniendo una mejor remuneración salarial. La producción que gira en torno a VW en Puebla equivale a más del 40% del Producto Interno Bruto del estado, y justamente exigen un incremento del 11% directo al salario.

Como consecuencia de la crisis económica que afecta fuertemente a la industria automotriz, la empresa se negará a ceder a las exigencias de los trabajadores que han emplazado a huelga para el próximo 18 de agosto. La patronal trata de mantener sus ganancias, precarizando las condiciones laborales y recortando la plantilla de los trabajadores eventuales. Con la intención de impedir la máxima unidad de acción de los trabajadores en esta lucha por aumento salarial, la empresa propuso a implementar el sistema “4x3” (trabajar cuatro días y descansar tres), para no despedir a más de mil 300 trabajadores eventuales. Esta maniobra, desafortunadamente dividió a los trabajadores sindicalizados (la mayoría de los cuales no aceptó) de los eventuales, así que a partir del mes de septiembre estos trabajadores serán despedidos.

Estos recortes responden a la situación económica por la que atraviesa Europa, en este caso Alemania, principal destino de automóviles armados en México. Como se mencionó antes, la burguesía es la única responsable de esta situación, pero los trabajadores son los únicos que estamos pagando por su crisis, con bajos salarios y despidos masivos. Todo esto aceptado por la mayoría de los dirigentes que no emprenden una lucha consecuente por los intereses de la base sindicalizada. La empresa utiliza a los representantes sindicales para frenar el descontento los trabajadores y también divide a los trabajadores con categorías como: de confianza, de base, sindicalizados, no sindicalizados, con el fin de que la clase trabajadora no tome conciencia que es ella la que produce colectivamente la riqueza del país, pero quien se apropia de dicha riqueza es el patrón en forma individual.

A nivel nacional, por ejemplo, del año 2007 al 2011, las ganancias de empresas automotrices subieron a costa de los salarios. Mientras que las primeras aumentaron del 69.7% al 77.4%, los segundos cayeron del 30 al 22.3 por ciento, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (La Jornada, 12/08/13). ¡Sí es posible obtener el aumento salarial planteado por el SITIAVW!

Los trabajadores debemos tomar plena conciencia de que sólo nosotros hacemos andar la producción y generamos la riqueza. Esto queda claramente demostrado cuando hacemos uso de nuestro derecho a ir a la huelga. La producción, los servicios y la sociedad se paralizan, pues sin los trabajadores no se mueve nada. Las fábricas pueden funcionar sin patrones, pero no sin trabajadores. Por lo tanto, tenemos el derecho legítimo de exigir salarios y servicios de salud dignos y sin costo, también servicios educativos gratuitos en todos los niveles. En pocas palabras necesitamos condiciones laborales y de vida dignas. Pero bajo el capitalismo esto es una utopía. Por eso es necesario que los trabajadores nos organicemos para exigir reivindicaciones de carácter inmediato, pero a la vez para que luchemos por la transformación socialista de la sociedad. Esta es la única alternativa para un cambio radical en la distribución de la riqueza y porque sean los propios trabajadores los dueños de esa riqueza que ellos mismos están produciendo, y sean ellos quienes la distribuyan de acuerdo a sus necesidades.

Los trabajadores deben orientar su lucha en esa dirección, exigiendo a su dirigencia sindical que el aumento salarial responda realmente a las necesidades económicas de los trabajadores y no a las negociaciones convenientes a la empresa. Deben exigir la permanencia de todos los trabajadores eventuales, así como la reinstalación de los que ya han sido despedidos en los últimos meses y que se les otorgue de inmediato la base con todas las prestaciones. De igual modo deben vincular su lucha por aumento salarial, a la lucha de otros sectores de la clase trabajadora en nuestro país, como el magisterio democrático y quienes saldrán a movilizarse por la defensa de PEMEX.

¡Por un sindicalismo democrático y combativo!

¡Que los capitalistas paguen por su crisis!

¡Por mayor aumento salarial para los trabajadores y ni un despido más en Volkswagen!

¡Por un Frente Único de lucha en defensa de los derechos laborales y contra la privatización de PEMEX!

¡Por la transformación socialista de la sociedad!


banner libres y combativas

banner

banner

banner libres y combativas

banner revolutionary left

banner sindicato de estudiantes

banner revolucion rusa