He aquí un libro impresionante, un clásico sobre la historia del movimiento obrero estadounidense escrito con rigor y compromiso con los oprimidos, e intenso desprecio hacia los explotadores y su sistema. Dinamita, historia de la violencia de clases en EEUU, 1826-1934, merece ser leído por todos los militantes de la izquierda revolucionaria y anticapitalista.

¡257 números publicados además de los especiales y suplementos… Tres décadas del periódico obrero Militante!, entusiastas arrancamos la campaña de aniversario, 30 años donde nuestra mayor motivación es la confianza inquebrantable en el futuro socialista, basada en una convicción científica sustentada en el método de análisis del marxismo, que contrastado con la realidad nos demuestra la viabilidad y fehaciente necesidad de una sociedad más humana y justa, posible gracias al desarrollo de los medios de producción, a la necesidad de arrebatar la propiedad privada de los mismos  y socializarlos para satisfacer las necesidades de la mayoría,  a la poderosa fuerza de nuestra clase que esta llamada por la historia para llevar a cabo esta tarea titánica y que ha demostrado su capacidad una y otra vez a lo largo de la historia.

Guillermo Almeyra, militante socialista durante 72 años, murió de insuficiencia respiratoria este domingo 22 de septiembre en el hospital Timone en Marsella, Francia. Ha dejado un gran legado de lucha para las próximas batallas.

El 24 de septiembre conocíamos la noticia de que el Tribunal Supremo aprobaba la exhumación de Franco del Valle de los Caídos, sin aceptar que sea enterrado en la Almudena (donde la familia del dictador tiene un mausoleo por valor de 120.000 euros). Esta decisión, sin duda, es una victoria de las organizaciones memorialistas y de las víctimas del franquismo que han peleado durante años porque la momia del dictador abandonará su actual emplazamiento. Pero, a pesar de su trascendencia, sigue siendo completamente insuficiente. Todavía hay que acabar con la impunidad de los crímenes de la dictadura depurando el aparato del Estado de elementos fascistas, y poder enterrar a los cientos de miles de combatientes republicanos que siguen en fosas y cunetas, reparando moral y económicamente a sus familiares y a todas las víctimas de la represión.

Hace treinta años en la plaza de Tiananmen de Pekín (Beijin), en el mismo escenario donde Mao Ze Dong había proclamado la República Popular China un primero de octubre de 1949, cientos de miles de jóvenes estudiantes protagonizaron un movimiento revolucionario en defensa de un socialismo democrático, sin corrupción ni diferencias sociales.