Las bases debemos votar al PRD y luchar por un giro claro a la izquierda
Desde el triunfo de Cuauhtémoc Cárdenas como Jefe de Gobierno en las elecciones de 1997, ha sido el PRD quien ha gobernado el Distrito Federal. Con mayoría definitiva el PRD ha ganado todas las elecciones a jefe de gobierno, que en total han sido tres 1997,2000 y 2006. En la Asamblea legislativa el PRD ha ganado en las cinco elecciones pasadas (1997,2000, 2003,2006 y 2009) un total 159 diputados, mientras que el PAN ha ganado 39 y el PRI ni uno solo. En las cuatro elecciones para jefes de las 16 delegacionales (2000, 2003, 2006, 2009) el PRD acumuló un total de 49 delegaciones ganadas, mientras que el PAN acumuló 13 y el PRI sólo una en la elección del 2003. En el año 2009 el PT con el apoyo de AMLO ganó la delegación Iztapalapa a través de “Juanito” del PT quien luego fue sustituido por Clara Brugada (PRD). Aquel caso está vinculado a la actual situación del partido. Recordemos que el tribunal electoral del poder judicial de la federación, anuló la candidatura de Brugada a tan solo 23 días de la elección y con las boletas impresas que no podían cambiarse en una segunda reimpresión. Ante el fraude orquestado por los chuchos y el gobierno federal, los marxistas de la TMM planteamos que lo correcto era luchar firmemente por imponer a Brugada, tal cual era el sentir de las bases del partido, y así dar un golpe no sólo en Iztapalapa sino además a esa corriente de infiltrados de derecha dirigidos por Jesús Ortega que mucho daño han provocado al partido.
El DF es un bastión de la izquierda y demuestra cómo la derecha, PRI y PAN, logran imponerse en provincia entre otras cosas por el uso del aparato del estado, la represión física y la intimidación.
El peso del DF en la lucha a nivel nacional se demuestra al ver que los dos candidatos del PRD a la presidencia: Cárdenas en el año 2000 y AMLO en el 2006 salieron precisamente de la Jefatura de Gobierno del DF. En las elecciones del 2006, el DF significó cerca de dos millones 813 mil 112 votos, es decir (según cifras aproximadas debido al fraude de aquel año) un 19% del total de votos que AMLO recibió.
A Infiltraciones y ataques de derecha, errores de izquierda
La burguesía a través del PRI, el PAN, los medios de comunicación y parte de la iglesia ha lanzado todo tipo de ataques hacia el PRD. Parte de esos ataques los pudimos ver en el 2005 con el desafuero de AMLO. Al mismo tiempo han infiltrado a agentes de la derecha dentro del partido, los “chuchos” son el grupo que más ha trabajado para destruir desde dentro al PRD.
Pero el PRD también ha tenido que soportar los graves errores de los grupos y personajes más identificados con la izquierda. Rosario Robles como Jefa interina del Gobierno en el DF, fue cómplice de la represión violenta a los jóvenes del CGH. Es cierto que para aquel entonces la huelga universitaria se había entrampado en un callejón sin salida en donde incluso los grupos estudiantiles dirigentes estaban cometiendo severos errores políticos, pero la represión como salida al conflicto universitario no era la solución. Robles debió exigir al Gobierno Federal de Ernesto Zedillo que cumpliera con las demandas del movimiento estudiantil.
En los grandes acontecimientos de la lucha de clases de nuestro país, los dirigentes de izquierda del PRD, incluso los más cercanos a AMLO han jugado (en el mejor de los casos) un papel muy gris. En la lucha contra las reformas al régimen de jubilaciones y pensiones del IMMS, el PRD estuvo ausente a pesar de que las más importantes movilizaciones se realizaron en el DF. En la lucha contra el examen universal al magisterio el PRD del DF no ha dicho nada. Así podríamos seguir citando casos.
Los dirigentes más identificados con la izquierda en el PRD-DF han cometido el grave error de no confrontar directamente a los chuchos y expulsarlos, tampoco han sido capaces de diferenciar su programa, en lugar de defender abiertamente los derechos más importantes de los trabajadores se han dedicado a lograr una “buena administración” en el GDF. Esto es un grave error pues la derecha del partido ha tenido prácticamente manos libres para impulsar campañas con la derecha y para realizar un sinfín de traiciones al PRD y al movimiento obrero.
El PRD en el DF ha ganado elecciones no gracias a su dirección sino a pesar de su dirección.
Una batalla importante
Ahora de frente a las elecciones presidenciales y en el DF para jefe de gobierno en el DF, existen grandes contradicciones importantes sobre las cuales debemos tomar posiciones todos los compañeros de la izquierda. Miguel Ángel Mancera (exprocurador de Justicia en el GDF) ha sido designado mediante tres encuestas realizadas por empresas privadas.
Sin embargo Mancera no es ningún luchador social, nunca se le ha visto en movilización alguna, nunca ha expresado una declaración de rechazo hacia las políticas de Felipe Calderón, nunca se ha manifestado contra los sangrientos resultados de la guerra contra el narco. Para colmo ni siquiera es miembro del PRD. El programa que está levantando es “continuidad e innovación” con ello engloba una serie de reformas sobre transporte, vivienda, seguridad, etcétera pero en concreto no plantea ninguna cifra clara.
Los problemas fundamentales como educación, salud, trabajo, salarios, no son abordados por Mancera en su programa de gobierno. Ante la candidatura de AMLO a la presidencia, Mancera no está jugando ningún papel, incluso ahora se ha adelantado a declarar que “trabajará con el próximo presidente”, es decir que si hay fraude, el no va a luchar contra un posible nuevo espurio.
La derecha no ganó, la izquierda se dejó ganar
Marcelo Edrard primero intentó imponer a Mario delgado (ex secretario de finanzas y de educación en el DF) como aspirante a la candidatura de jefe de gobierno por el PRD, pero cambió por Mancera al ver el poco éxito de su primera alternativa. De esta forma, Mancera se convierte en el “gallo” de Ebard impuesto bajo el engaño de las encuestas que lo posicionaron.
Es sabido que todas las encuestas pueden arrojar resultados favorables para quien más pague por ellas, no se trata de un método confiable. Martí Batres y Fernández Noroña, como dirigentes más cercanos a la izquierda, nunca debieron aceptar las encuestas como método para designar al candidato, ni mucho menos debieron levantar la mano a Mancera como el ganador de la contienda interna. Si sus fuerzas eran menores y no podían frenar la cargada hacia Mancera, lo que debieron hacer era declarar que no estaban de acuerdo y que lucharían porque el PRD se librara de todo tipo de arribistas.
En los meses previos cuando Martí Batres criticó el saludo que Marcelo Ebrard a Felipe Calderón actuó correctamente, luego con su destitución en el GDF ganó la simpatía de mucha gente, ya que el caso demostraba lo nefasto que es Ebrard para el PRD y para la candidatura de AMLO. Martí tenía el respaldo de una parte importante de las bases del partido para encabezar movilizaciones. Un llamado serio a la lucha lo abría puesto como un serio contendiente a la jefatura de gobierno. Sin embargo prefirió los “acuerdos políticos”, acuerdos que luego nadie le cumplió.
Todos los dirigentes más identificados con la izquierda en el PRD-DF han aceptado a Mancera como candidato, ninguno fue capaz de hacer ni siquiera una declaración medianamente firme.
¿Qué debemos hacer en las elecciones del DF?
La definición de Mancera, el método por el cual fue impuesto, más todos los errores de las corrientes de izquierda dentro del PRD DF han provocado confusión y desánimo entre un sector de la base tradicionalmente perredista. Sin embargo el PRD con Mancera como candidato va a ganar y una vez más no gracias a la dirección del partido sino muy a pesar ella. La clase trabajadora botará a favor del PRD porque sabe que el regreso del PRI o el triunfo del PAN significaría un autentico retroceso en la lucha social.
Sin embargo es importante reconocer que el PRD en el DF, a pesar de los triunfos electorales, está en una grave crisis interna que puede destruir lo que anteriormente se ha ganado. La base del partido debemos exigir que el partido retome realmente la creación de comités de base en todas las colonias, debemos exigir que sean las asambleas de estos comités las que definan a los candidatos. Al mismo tiempo es necesario que cada delegado, diputado y hasta el Jefe de gobierno reciban el salario de un trabajador cualificado. De esta forma romperemos la tendencia hacia la descomposición que marca al PRD en el DF. Si esta lucha no la realizamos, entonces el triunfo electoral en la jefatura y delegaciones será muy poco útil para los trabajadores y la juventud.
Por otro lado, las leyes económicas del capitalismo no hacen una excepción para la ciudad de México por ello, la crisis económica internacional aquí también se reflejara con crudeza. El futuro gobierno de Mancera estará marcado por la tendencia a los cierres de empresas, desempleo, destrucción de salario, etc. Es necesario que las bases del partido y toda la clase trabajadora presionemos a Mancera para que enfrente la crisis y sus efectos con un autentico programa de empleo, salario digno, de vivienda, salud y educación. Nadie en una ciudad gobernada por el PRD debe ser golpeado por la pobreza. Para lograr esto el gobierno del PRD DF en conjunto con el movimiento social debe luchar por expropiar a las empresas más importantes.
El voto por Mancera y el resto de candidatos del PRD debe ir acompañado por una batalla por recuperar al partido y por obligar a que el futuro gobierno en la ciudad adopte un autentico programa de izquierda.