La contaminación del aire es la primera causa de muerte en México por factores medioambientales y la novena causa en términos generales. En 2010 hubo 20 mil 500 decesos por esta causa.
Según Enviromental Performance Index, los mexicanos ocupamos en este año el lugar número 64 de 115 países más contaminados. El reporte “Urbanoutdoor air pollutiondatabase”, publicado por la OMS, el Valle de México, Monterrey y Mexicali son las ciudades mexicanas entre las urbes más contaminadas del mundo. Incluso la UNAM asegura que nuestros niveles de contaminación podrían asimilarse a los de China.
Al mismo tiempo los agrotóxicos también juegan su papel, hay investigadores que afirman que los índices de cáncer en México han aumentado a partir de 1989 y esto esta vinculado a dichos químicos, la situación es tan grave que se registró como la segunda causa de muerte del país (más de 40,628 muertes). El índice de personas con cáncer de estómago en la ciudad de Comitán y en la Costa de Chiapas ha ubicado en primer lugar a nivel mundial en esta enfermedad. Ello se debe a que en la región se utiliza el líndano (plaguicida) para matar piojos y atacar la sarna de los cerdos. Incluso la IARC ha clasificado al líndano como un posible carcinógeno.
Otros casos de contaminación
El río Temascatío, colindante con río Lerma, es uno de los ríos más contaminados de México. Este ha generado un problema de salud pública como migrañas, afecciones de garganta, problemas en la piel, en el sistema digestivo y ojos. Además, la mezcla de los desechos, tan diferentes, de las industrias han provocado dos incendios en tan sólo 6 meses debido a altas concentraciones de petróleo arrojadas por diversas industrias establecidas en torno al río (Pemex, Cemex, CFE, Covemex, Danone, etc.
A su vez en el rio Grijalva, principal productor de energía hidroeléctrica en el país, se retiraron 700 toneladas de basura a la altura del Cañón del Sumidero en los 8 primeros meses de 2013; esto según registros de la Dirección Regional Frontera Sur de la CONANP.
El Arroyo Alamar, uno de los tributarios del Río Tijuana, ubicado en la vertiente pacífica de Baja California en México y el sur de California en los EEUU, fue incluido por el Almanaque Gráfico de México como uno de los 20 ríos más contaminados del mundo y uno de los escasos suministros de agua con que cuenta la ciudad de Tijuana. En 2012 el gobierno municipal, en conjunto con el gobierno estatal y federal, inició la construcción de vialidades intentando así conectar la vía rápida de Tijuana con la carretera a Tecate, incluyendo la canalización de la tercera sección del rio Alamar lo que atenta contra el ecosistema.
Sin embargo muchas veces, si no es que toda vez que los medios de comunicación hablan sobre este tema tan alarmante, se expresan como “los seres humanos estamos provocando los problemas ambientales”, con ello solo tratan de ocultar a los verdaderos responsables. El gran peso de esta responsabilidad la tienen las grandes empresas, que en ningún momento han detenido la producción para cuidar el medio ambiente o los recursos naturales. Las grandes empresas no invierten en tecnología que evite la contaminación porque elevan los costos de producción y reduce sus beneficios económicos. Por otra parte los gobiernos son totalmente incapaces de generar programas que erradiquen seriamente los problemas de contaminación derivados de la urbanización. De hecho los asentamientos irregulares no son la expresión del conformismo y la inconsciencia de quienes ahí viven, sino la expresión de la pobreza que ha generado el capitalismo. Una política seria de cualquier gobierno tendría que implicar regulación a las industrias, pero eso es morderse la cola. Con todo esto somos la clase trabajadora quienes pagamos los platos rotos.
Contra la contaminación
La movilización de organizaciones sociales frente a esta situación ha logrado que proyectos que afectan al medio ambiente y a los recursos naturales del país no se concluyan. Metales y Derivados en Tijuana es uno de los sitios de desechos tóxicos en los estados mexicanos fronterizos, anteriormente era una fábrica maquiladora estadounidense que reciclaba baterías importadas de este país hasta que en 1994 se clausuró por la lucha de la comunidad de Chilpancingo de Tijuana que denuncio por problemas de salud y violaciones a la ley medioambiental. A pesar de ello quedaron en el predio 23 mil toneladas de desechos tóxicos de los cuales 7 000 son toneladas de plomo. Finalmente, en 2004, la Coalición de Justicia Ambiental y la comunidad acordaron con el gobierno mexicano la limpieza del lugar, la cual concluyó en 2008. Ahora esta agrupación lucha para echar atrás el proyecto del arroyo Alamar. “El proyecto de canalización destruiría cualquier posibilidad de que pudiera subsistir el ecosistema.”
Las luchas contra proyectos de este estilo, que intentan destruir recursos naturales y contaminar sin control es correcta, sin embargo debe reconocerse que la causa del problema medioambiental solo puede erradicarse enfrentando a las grandes empresas que lo generan y presionando a los gobiernos locales y federales. Es decir que se debe enfrentar al capitalismo que, lejos de generar empleos bien pagados y con prestaciones, provoca la destrucción de nuestros ríos, mares, desiertos y bosques. Una lucha así necesita de la unidad entre estas organizaciones que defienden el medio ambiente y los grandes sindicatos y partidos de izquierda, luchando hombro con hombro, con la movilización en las calles, pues es la única que puede vencer cualquier injusticia y vencer al puñado de gente que domina el planeta, y como consecuencia obtener el mejor de los cuidados a los recursos naturales y medio ambiente.