León Trotsky aportó grandes ideas al arsenal del marxismo revolucionario, que ayudaron a profundizar y encarar muchos aspectos que el desarrollo del capitalismo puso en el orden del día. Desde la teoría de la revolución permanente, formulada al calor de la primera revolución rusa de 1905, Trotsky abordó cuestiones esenciales de la actividad revolucionaria y los problemas de la lucha de clases contemporánea. Contribuyó de manera destacada a la defensa de la dialéctica materialista, a lucha contra el revisionismo defendiendo vigorosamente la teoría marxista del Estado; al análisis del imperialismo, la táctica y la estrategia revolucionaria, plasmados de manera excepcional en los principales manifiestos y documentos de los cuatro Primeros Congresos de la Internacional Comunista. Una obra que se completó de manera fundamental en los años posteriores a la muerte de Lenin, cuando la fidelidad al programa marxista leninista se pagaba con la detención, la cárcel o el internamiento en los campos de concentración de Vorkutá.
La denuncia de la degeneración burocrática del Partido Comunista de la URSS y los crímenes del estalinismo le supusó su expulsión de la URSS y su largo exilio. En esos años Trotsky escribió los que serían sus trabajos más sobresalientes: Historia de la Revolución Rusa, La revolución Traicionada, Stalin, En defensa del marxismo, El programa de Transición y miles de artículos que dieron lugar a obras excepcionales, como Adónde va Francia, La Lucha contra el fascismo en Alemania, o la compilación de sus escritos sobre la revolución española.
En este periodo, Trostky vivió desde la lejanía la aniquilación, por orden de Stalin, de la generación revolucionaria y también la de su familia, la infamia de los Procesos de Moscú, y se vio obligado a vagar por un mundo sin visado para él, hasta que finalmente recaló en el México de Lázaro Cárdenas. Por encima de todas las adversidades, de todas las circunstancias trágicas que vivió junto a su compañera Natalia Sedova, León Trotsky continuó levantando la bandera del marxismo y dedicando sus energías al renacimiento de las fuerzas del comunismo liberadas de la impostura y la traición. Su coherencia y lealtad a la causa de los trabajadores y la revolución le llevó a la muerte, pero su legado sigue más vivo que nunca.
La Corriente Marxista Revolucionaria (El Militante) lleva años colaborando con la Fundación Federico Engels (FFE) en la publicación de las obras de León Trotsky, un compromiso político que ha sido sobradamente compensado con la gran acogida que ha tenido esta labor editorial. Para conmemorar este aniversario, la FFE va a reeditar el primer libro que editó, allá por 1989, La Revolución Traicionada, un texto que la nueva generación de revolucionarios debe estudiar con aplicación.
A continuación dejamos a nuestros lectores la edición en PDF del extra que El Militante publicó con motivo del 70 aniversario del asesinato de León Trotsky.